La situación de las urgencias en los centros hospitalarios de Málaga vuelve a desatar las alarmas. En esta ocasión, ha sido CCOO quien ha criticado, una vez más, el “colapso” en el servicio en el Hospital Clínico donde aseguraron ayer que había “más de una veintena de pacientes esperando camas” desde el domingo. Ante esto han propuesto como solución que se habiliten las 48 camas que hay en el Hospital del Guadalhorce y que se cubran las bajas y reducciones de jornadas pendientes aún en el Clínico.
Desde el Sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Málaga han asegurado que la mayoría de estos pacientes “están en camillas en los pasillos del departamento de Observación y en los de Policlínica”, lugares que, a juicio del sindicato, “no reúnen las condiciones de intimidad que están obligados a tener”. Al tiempo que han criticado que “en ninguno, a pesar del aumento de personas enfermas, se ha reforzado el número de personal”.
Por ello, CCOO ha exigido “medidas urgentes para paliar esta situación”,que se cubran las bajas y reducciones de jornadas existentes en estos momentos. Como ejemplo, ha explicado que en el caso de las auxiliares de enfermería “hay 10 bajas sin cubrir y otras tantas reducciones de jornada”.
Técnicos de Enfermería
Por su parte, el sindicato de Técnicos de Enfermería ha exigido la contratación inmediata de refuerzos en el Hospital Virgen de la victoria y han recalcado que “los datos no dejan lugar a la duda de la necesidad de emergencias que se vive en las urgencias del centro”.
“16 pacientes en observación, a la espera de subir a planta de hospitalización, 3 en la policlínica, 5 y 6 pacientes en camilla (no en cama) recibiendo atención en el servicio de urgencias, una persona con tuberculosis activa que permanece en una consulta (que no es, en absoluto, el lugar idóneo para su atención) y que va a pasar a la observación de urgencias con mascarilla (y que, por supuesto, tampoco es el lugar adecuado)”, así han descrito la situación desde este sindicato, con el agravante de “un profesional técnico de cuidados de enfermería (TCE) para atender una media de 10 pacientes en el área de observación” y con una ratio en la policlínica que es “similar”. Por eso también han denunciado que, a pesar del “altísimo número” de pacientes en urgencias, “no se ha reforzado la plantilla con ningún profesional”.
Esta situación se completa, aseguran, con responsables intermedios cuya respuesta ante el traslado de la situación, a pesar de que la conocen, es que “se comunique a los sindicatos”. Por eso, según Miguel Ángel Guerrero, delegado SAE en el centro, los TCE del servicio de urgencias “están al límite de su situación emocional y física porque estos hechos son inadmisibles. Prestar atención sanitaria en estas condiciones es un riesgo para todos: para los pacientes que tienen que esperar más tiempo del necesario para recibir los cuidados que precisan, para los profesionales que están trabajando sin poder parar un minuto, y además con el riesgo que supone no disponer de los medios para pacientes concretos”.
Desde el Clínico señalaron que continúan con gran afluencia de pacientes en urgencias, “coincidiendo con el pico de casos de gripe tal y como estaba previsto pero todos los recursos se encuentran disponibles a 100% y se están gestionando según las necesidades asistenciales”.
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