Sevilla

La familia del niño muerto en la cacería se persona como acusación

La familia del niño de 4 años que murió el 19 de enero en una cacería en Guillena (Sevilla) se ha personado como acusación particular contra el presunto autor

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • La finca "La lapa" donde falleció el niño. -

La familia del niño de 4 años que murió el 19 de enero en una cacería en Guillena (Sevilla) se ha personado hoy como acusación particular contra el presunto autor del disparo que impactó en la cabeza del menor, que está en libertad provisional acusado de un homicidio imprudente.

La acusación particular pretende que al acusado se le impute un delito de homicidio imprudente grave porque considera que actuó de forma negligente e imprudente al moverse más de veinte metros de su puesto de caza para realizar el disparo mortal, algo expresamente prohibido en monterías de jabalíes de este tipo.

Los familiares también le quieren imputar un delito de omisión del deber del socorro porque aseguran que, tras el disparo, el acusado no se quedó en la zona para atender al menor, que estaba sentado en un banquito de caza junto a su padre y su abuelo, que son cazadores habituales, según ha explicado a Efe la abogada de la familia, Rosario Serrano Ruiz.

También reprochan los familiares que en el puesto reservado al acusado, L.A.G., argentino sexagenario afincado en El Puerto de Santa María (Cádiz), había dos cazadores en vez de uno, como marca la normativa de las monterías, en las que se pagan entre 200 y 300 euros por jornada de caza.

Los familiares del menor, que recibió un solo impacto de una bala de 12 milímetros, justifican que lo llevaran como espectador a la montería porque es una práctica habitual entre los cazadores y además es legal, algo que el abuelo ha hecho habitualmente con otros niños.

Tras el suceso, numerosos usuarios de redes sociales criticaron que los familiares llevaran al menor a una montería, algunos de ellos con tuits que la abogada califica de muy ofensivos y contra cuyos autores se reserva actuaciones legales.

El padre y el abuelo del menor tienen previsto llevar sus armas el sábado 26 de enero hasta el puesto de la Guardia Civil de La Rinconada (Sevilla) para confirmar que de sus escopetas no salió el disparo mortal, algo que los agentes hicieron el día de los hechos con el resto de cazadores excepto con sus familiares por los momentos de tensión que sufrían.

El disparo le provocó al menor un traumatismo craneoencefálico que le causó la muerte a pesar de los intentos de los médicos durante dos horas para salvarle la vida.

El suceso tuvo lugar en el coto "La Lapa", del término municipal de Guillena, situado en las primeras estribaciones de la sierra norte de Sevilla, y el menor fue atendido en el centro de Salud de Burguillos, hasta donde fue trasladado en helicóptero.

El autor del disparo declaró el pasado lunes 21 de enero en el juzgado de instrucción 16 de Sevilla, cuyo titular le ha dejado en libertad provisional acusado de un homicidio imprudente y le ha prohibido usar armas de fuego y que practique la caza mientras dure la instrucción.

El cazador, de profesión arquitecto, tiene licencia de caza, todos los permisos de armas en regla y seguro de responsabilidad civil para practicar la actividad cinegética.

El juez ha citado como testigos el próximo 8 de febrero al resto de participantes en la montería y al organizador de la misma.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN