De Brasil a Italia, de Vista Alegre a Hungría y Austria. Desde Trump, en los Estados Unidos, a la Italia de Salvini una marea negra recorre el mundo. Resulta especialmente novedoso que se esté corroyendo el alma de la vieja Europa que hizo de la defensa de los derechos humanos la razón de su existencia tras la Segunda Guerra Mundial. Sorprende igualmente la pujanza de esta corriente de pensamiento ultra en los países que se encontraban bajo el dominio soviético y que tras la caída del muro de Berlín se abrieron a las democracias occidentales. La vieja Europa y la nueva Europa empiezan a tener las mismas amenazas.
La marea negra se está nutriendo de pulsiones xenófobas, de un decidido empeño en la restauración de la Europa de las naciones frente a la Unión Europea, de un populismo que pretende aterrorizar a las poblaciones por los movimientos migratorios y las crecientes demandas de asilo. Comenzó con un grito que se inició con el “América, primero” y que continuó con la exigencia de un muro infranqueable frente a México y le hicieron ganar no las votaciones pero sí la presidencia. Al peor presidente que ha gobernado los EEUU le ha continuado el líder de la Liga Norte italiana y ministro del Interior. Una sola frase lo retrata en el debate de la limpieza de sangre: "Desgraciadamente, a los gitanos italianos te los tienes que quedar". ¿Para qué explicar más sobre su ideología?
Tres recientes acontecimientos ilustran la situación. Primero, la reunión para un frente en Europa entre Salvini, y la ultraderechista francesa, Marine Le Pen, para llevar adelante una "revolución" en las elecciones europeas de mayo, y ni más ni menos que "salvar Europa”. El segundo, el acto que ha supuesto la puesta de largo del partido Vox, hasta ahora visto como un movimiento folklórico de la derecha nostálgica española, pero que desde que Casado y su inefable secretario de organización manifiestan que tienen cosas en común, le están dando la bienvenida a la democracia española. “Para mí el mundo ideal es que Foro, PAR, UPN, Ciudadanos, y Vox estemos unidos o en coalición... Que exista una concentración de los esfuerzos del centroderecha liberal y conservador”, ha manifestado Casado, en concomitancia con el pensamiento de Aznar. Tercero, Brasil. El mayor país de Iberoamérica ha votado en un 46% a un candidato que imita a Trump. La solución, en una semana.
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