El Colegio de Enfermería de Málaga ha reivindicado la recuperación de las Unidades de Atención Familiar, formadas por un médico y un enfermero de referencia, con el objetivo de "beneficiar a la población y a los profesionales, generando estabilidad, apoyo mutuo en la atención en salud y continuidad en los programas y proyectos en marcha".
Para ello, según ha explicado el presidente, Juan Antonio Astorga, se precisarían en la provincia entre 100 y 120 enfermeros. A su juicio, para los usuarios, "disponer de un enfermero de referencia estable, y mejor si fuese elegido libremente, es fundamental sobre todo para la debida atención a pacientes crónicos, sea en consulta o en visita domiciliaria".
El presidente de los enfermeros malagueños ha recordado que los equipos de Atención Primaria estaban constituidos por un médico de familia y un enfermero de familia; sin embargo, durante la crisis "se perdió esta dualidad, en detrimento de los enfermeros y de los ciudadanos, de tal forma que los vinculados a varios cupos médicos convergen en una misma enfermera".
Estas profesionales deben coordinar su actuación con varios médicos por lo que los ciudadanos "no terminan de identificar un equipo de atención familiar".
En este sentido, Astorga ha recordado que la Consejería de Salud ha impulsado una estrategia de Atención Primaria que pivota sobre la recuperación de las Unidades de Atención Familiar "conformadas como siempre fue por un médico y un enfermero, pero aún no se ha llevado a efecto".
Por tal motivo, el Colegio de Enfermería de Málaga quiere reivindicar esta necesidad en la Atención Primaria, así como la de establecer la ratio enfermera por habitantes en una por cada 1.500 habitantes.
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