Reza un dicho que quien da la voz de alarma por el fuego corre el riesgo de acabar acusado de pirómano. “Mutatis mutandis”, esto es lo que le está ocurriendo al inspector médico que durante meses alertó de las irregularidades que se estaban produciendo en clínicas de iDental en Sevilla y que ha acabado siendo objeto de un expediente disciplinario por sus superiores en la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, por una supuesta desobediencia a los mismos.
El caso, destapado desde el principio por Viva Sevilla (tanto la existencia de los informes negativos sobre la empresa que ha acabado estafando, presuntamente, a más de mil sevillanos y a miles de españoles, como la apertura de este expediente disciplinario), ha causado estupor en la opinión pública, ya bastante escandalizada por cómo se ha podido producir este supuesto fraude masivo ante la inoperancia de los Servicios de Inspección Sanitaria de nuestro Gobierno autónomo y también de sus homólogos en el resto de España. Mucho nos tememos que se pueda llegar a pensar que la incoación del expediente al inspector que en vano alertó sobre el peligro de las clínicas de iDental, sin ser escuchado, no sea más que una maniobra defensiva para tratar de crear un dique de contención de cara a posibles exigencias de responsabilidad en ámbitos superiores de decisión de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
