Con el pretexto de la crisis económica y la necesidad de reducción del déficit público, más también incapacidad de gestión, durante el mandato de Zoido el Ayuntamiento prácticamente no construyó viviendas públicas, algo sin precedentes durante el periodo democrático, y dejó sin funciones y al borde del cierre a Emvisesa mientras en paralelo Sevilla seguía perdiendo población en beneficio de los municipios del área metropolitana, donde sí había ofertas de pisos y más baratos que en la capital.
En estos tres años de mandato, el gobierno de Espadas ha revertido progresivamente la situación de Emvisesa, la cual ha recuperado la misión para la que fue creada; ha adjudicado más de 600 viviendas; ha desarrollado nuevas políticas en materia de permutas, alquileres y pisos vacíos, y culmina su labor en este campo con la redacción del Plan de Vivienda para el próximo lustro, con una previsión de construir 3.500 que movilizarán una inversión de 318 millones de euros. Entre las medidas del Plan destaca una que supone la adecuación a la realidad socioeconómica: poner al menos un millar a precios asequibles para familias que por sus ingresos no pueden acceder a viviendas sociales, ya que superan el mínimo exigido, pero tampoco a las de renta libre porque no les alcanzan. En resumen, con Espadas vuelve a haber política municipal de vivienda y esto sí es una prioridad para la ciudad.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
