Mágica, divertida, ilusionante, familiar, calurosa, misteriosa...Así fue la IV Carrera Nocturna-Noche de San Juan organizada por el programa ‘Jaén Genuino. El pasado sí tiene futuro’ de VIVA JAÉN, que congregó en la plaza de Santa María a miles de personas la noche del sábado, entre corredores y jienenses en general. El entorno de la Catedral se vistió de verde desde última hora de la tarde.
Con un total de 1.427 corredores inscritos, fueron la mayoría los que lucieron la camiseta de esta edición, verde y con letras de color morado, con un dorso en el que se leía ‘Por nuestro conjunto histórico’.
Fueron llegando poco a poco y formaron fila no sin antes calentar al ritmo de la actividad de zumba, a cargo de Santagadea Sport, con la que entraron en calor para afrontar la carrera. Todo ello con la animación del speaker Gaspar Molina, que un año más se entregó a la carrera, anunciando cada actividad y lanzando todo tipo de mensajes para ambientar una noche que se presentaba ilusionante.
Personas de todas las edades, grupos de atletas, clubes deportivos y familias enteras esperaron a las 22 horas para dar las primeras zancadas y algún que otro paso e iniciar el itinerario por las calles del conjunto histórico de la ciudad.
En primera línea, el corredor más veterano, Francisco Castillo, de 80 años de edad; y el más joven, Jordan Rojas, que con dos años y medio participó junto a su abuelo.
Autoridades, patrocinadores y colaboradores esperaron el corte de la cinta inaugural. Estuvieron el edil de Deportes, José María Álvarez; el delegado de Fomento, José Manuel Higueras; el diputado provincial Pedro Bruno; el director del Secretariado de Deportes y Universidad Saludable de la Universidad de Jaén, Francisco Molina; el consejero delegado de Gestión de Medios Jienenses, Alejandro Más; el gerente de VIVA JAÉN, Tomás Roldán; el coordinador del periódico, Raúl Beltrán; y el comisario de Jaén Genuino, Rafael Cámara.
Todos animaron a los participantes a disfrutar e ilusionarse con una carrera no competitiva que, en sólo cuatro años, se ha consolidado, por ser la única que se celebra por la noche y en una tan especial, como la de San Juan. Entre aplausos y gritos de ánimo, los corredores llenaron la calle ‘Campanas’ de ambiente para llegar al barrio de San Ildefonso, en cuyas calles el pelotón comenzó a disolverse, con el ritmo propio de una carrera en la que participaron jienenses de todas las edades y condición física.
La subida por ‘Bernabé Soriano’, con la vista puesta en la Catedral, fue una de las más bonitas. La plaza de San Francisco estaba llena de público, que los despidieron hacia ‘Álamos’ y ‘Millán de Priego’.
Fue entonces cuando comenzó una de las etapas más duras de la prueba, con poco más de 3,5 kilómetros en los que no faltaron cuestas. “Esto es Jaén”, decían los corredores al subir por ‘San Andrés’, donde más de uno tuvo que bajar el ritmo y hacerla caminando. Y es que requirió un gran esfuerzo y éste no acababa ahí. Luego llegaron calles empedradas, con más cuestas para buscar el barrio de La Magdalena y toparse con su Raudal, para seguir subiendo hacia ‘Juanito el Practicante’. La llegada al Arco de San Lorenzo fue de las más esperadas, por la espectacularidad del entorno, con luz aún natural y una anaranjada artificial que embelleció el paso de los corredores.
Cansados ya, agradecieron la bajada por ‘Madre de Dios’ hacia ‘Colón’, para reencontrarse en la plaza de San Francisco con el público que los despidió al inicio de la carrera.
El paso por ‘Ramón y Cajal’ y por ‘Almenas’ fue de lo más reconfortante. La plaza de Santa María estaba cerca y con ella, la llegada a meta. Los primeros corredores la cruzaron en poco menos de un cuarto de hora y, tras ellos, las más de mil cuatrocientas personas que con su participación demostraron su afán por un casco histórico que necesita de todos para que sea un barrio cuidado y valorado.
La carrera transcurrió sin incidencias, gracias a la colaboración de numerosos voluntarios que controlaron el paso de los corredores por puntos claves del itinerario; y de los agentes de la Policía Local, que controlaron y evitaron la circulación por calles ocupadas por la carrera.
Tras recoger la bolsa del corredor, con artículos de merchandising, bebida y fruta, los participantes siguieron activos con la máster de zumba. Nuevamente, instructoras de Santagadea Sport cerraron la noche deportiva en la plaza de Santa María.
Desde allí arrancó el Vía Crucis ‘La noche de las confesiones’, a cargo de ‘Delirium. Laboratorio de Artes Escénicas’, que condujo a centenares de personas hasta la plaza de San Juan. Por segundo año consecutivo ‘Jaén Genuino’ unió la carrera nocturna con la tradición de la mágica Noche de San Juan y, nuevamente, de la mano de la compañía jienense, que hizo partícipe a todos de su espectáculo, que empezó en la calle Maestra, con el primero de los siete pecados capitales: la lujuria.
El objetivo de Jaén Genuino se cumplió en una noche mágica para la ciudad, que se echó a la calle para disfrutar de una actividad cultural, deportiva y social, en defensa del conjunto histórico. La carrera ha sido patrocinada por la Diputación, el Ayuntamiento, la Junta de Andalucía, la Universidad, la Caja Rural e Hyundai Jacarsa, con la colaboración de AktivJaén, Cruzcampo, Coca-Cola, el Mercado de Peñamefécit, Software DelSol, Grupo Avanza, Carrefour, Sierras de Jaén, Asisa, Gráficas La Paza, Santagadea Sport y Generali.
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