El juicio de los EREs sigue adelante y, tengo la impresión, de que nos vamos a quedar atónitos con las sentencias que van a recaer sobre tantos sinvergüenzas que han llenado de lodo todos y cada uno de los rincones de Andalucía, donde el Partido Socialista ha creado una red de estómagos agradecidos que le han permitido gobernar durante 40 años.
Es cierto, como ya expuse la semana pasada, que en muchos partidos no hay democracia interna y que funcionan a dedo, solo que algunos son más listos que otros y en vez de actuar directamente lo hacen a través de fundaciones como es el caso de hoy que me trae a estas páginas.
La Cámara de Cuentas de Andalucía dice que la Fundación Andalucía Emprende, dependiente de la Consejería de Economía, “ha contratado a dedo” a 764 trabajadores, lo que representa el 80% de los 955 que constaba la plantilla en el año de 2015, año fiscalizado por la Cámara y difundido en un documento el pasado 11 de mayo. No hace falta explicar quienes han sido los beneficiados de este dedo glorioso: esos estómagos agradecidos junto a otros cientos de miles atiborran las urnas de votos a la hora de las elecciones.
Amigos, amigachos, tíos, sobrinos, padres, hijos, cuñados y toda clase de parientes, incluida la mujer del alcalde de Sevilla, forman parte de esta era digital.
Mientras tanto, nuestros jóvenes universitarios tienen que emigrar a otros países en búsqueda de trabajo; espero y deseo que la Justicia de una vez por todas acabe con esta lacra de políticos sin escrúpulos que bajo la máscara de la hipocresía ocultan su ruín comportamiento.
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