El guitarrista flamenco Antonio Rey presentará su último trabajo discográfico el próximo jueves, día 1 de febrero, a las 21,00 horas, en el Teatro Quintero. En este disco ha colaborado Richard Bona, cantante, compositor y multiinstrumentista camerunés de jazz y jazz fusión, especializado en el bajo eléctrico.
Antonio Rey visitó la redacción de Viva Sevilla.
Diez años después de “A través de ti” llega este “Dos partes de mí”. ¿Qué tiene de novedoso este último trabajo con respecto a los anteriores?
-Yo diría que muchas cosas. Teniendo en cuanta que siempre somos nobeles, porque siempre estamos aprendiendo, el tiempo te va dando seguridad en ti mismo a la hora de componer. En esa búsqueda constante el tiempo te hace llegar a decir, este si soy yo, o al menos estoy más cerca. Como decía Moraíto, que en paz descanse, déjate de rodeos y dispara a la diana. Cuando era más jovencito componía, porque no tenía más remedio, para los discos. Técnicamente podía tocar lo que quisiera, música de Paco de Lucía, de Vicente Amigo, de Manolo Sanlúcar…pero no era yo, estaba en plena búsqueda. En Dos partes de mi me siento más yo, porque hay flamenco pero también otras músicas universales.
Será presentado en Sevilla con un concierto de guitarra flamenca lleno de matices y colores. ¿Cuáles son esos matices y colores?
-Los matices y colores son esa otra parte de mí, que no es flamenco, pero con la que me siento identificado.
En 2010 colaboró como Artista invitado en el grupo de Paco de Lucía. ¿Qué recuerdos le quedan de esa experiencia con el gran maestro?
-Toqué con el maestro Paco en Viena, tuve la suerte de estar en ese concierto. Toqué algunos temas con él, entre ellos el Entre Dos Aguas, que para mí fue espectacular. Te diré una cosa desde el corazón. Mientras tocaba con él esta pieza lloré, se me caían lágrimas como garbanzos, no me lo creía, fue una experiencia inolvidable, ya que era mi sueño desde pequeño.
Siempre se ha rodeado de grandes artistas que participan en sus discos. Diego el Cigala, Makarines Vicente Amigo, Estrella Morente, Miguel Poveda y Diego Carrasco.¿ Cuál sido la colaboración más especial para usted?
-Me pones en un compromiso… (risas). Muero con todos ellos y estoy muy agradecido de esas colaboraciones, pero como guitarrista fue muy especial tocar, en un disco mío, con Vicente Amigo, que en este disco le dedico un tema llamado Ídolo. Tocar con Vicente fue como tocar con Paco. Vicente canta con la guitarra.
¿Cuál será el recorrido del Espectáculo “Dos Partes de Mí” tras la presentación en Sevilla?
-En realidad el disco lleva en la calle siete meses, ya lo he presentado en Japón e Irán. Ahora vengo de hacer una gira por México, en ciudades como Monterrey, México DF, Querétaro, que acabó en Cancún, donde tuve la suerte de estar en la casa del maestro Paco de Lucía, vi sus guitarras y donde él tocaba, fue muy especial para mí. Ahora lo presentamos en Sevilla, el día 1 y en el Festival de Jerez, el día 23, en las Bodegas de Gonzalez Byass. Después nos iremos otra vez al extranjero, pasaremos por Alemania, Suiza y otra vez México y Japón. También estaremos en Barcelona, en septiembre, en el Palau de la Música. Esto está cerrado pero hay más cosas que caerán pero aun no puedo decirlo.
¿Quiénes participan en el espectáculo?
-Normalmente el grupo que llevo siempre, Paquito Vega, de Sevilla, un gran percusionista. Los Makarines, grandes amigos y a los que les he producido tres discos. Mi hermana Mara Rey, bailaora y cantaora, y un bajista sevillano que se llama José Manuel Posada "El Popo", aunque me gusta invitar a artistas de la localidad donde se realiza el espectáculo. Por ejemplo, al concierto de Sevilla vendrá un bailaor buenísimo llamado Polito.
¿Cómo repercutió en su carrera la obtención del “Bordón Minero” en el prestigioso Festival Internacional del Cante de las Minas en La Unión en 2003?
-Mira, a mi no me gustan los concursos, aunque tengo mucho que agradecerles. Mi padre me convenció para ir participar. Me dijo que era importante para mi carrera y tenía razón. He ganado varios primeros premios. Hasta hace poco tiempo no me di cuenta de la importancia y la trascendencia del Bordón Minero. Mucha más que todos los demás. Por ejemplo, me costó más trabajo ganar el Premio Nacional de Córdoba, que estaban en el jurado gente como Manolo Sanlúcar o Serranito, y en el que había que tocar las tres facetas, para cante, baile y solista. Pero la importancia del Bordón, que es solo en modo solista, es indiscutible y mucho más importante a nivel historia, promoción y contratación. Ganas el premio en Las Minas y automáticamente te empiezan a salir contratos. A mí me han abierto muchas puertas los concursos y he de reconocer que uno de los que más ilusión me ha hecho ha sido el Giraldillo de Sevilla.
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