El Ayuntamiento otorgará a título póstumo la medalla de la ciudad de Torremolinos al arquitecto Antonio Lamela, en un acto enmarcado dentro del Día de Torremolinos el próximo 27 de septiembre. A raíz de la concesión de la medalla de la ciudad, el Ayuntamiento pondrá en marcha una semana cultural en homenaje a Lamela, que el Consistorio organizará de forma conjunta con el Colegio de Arquitectos de Málaga.
El madrileño ayudó a convertir Torremolinos en un emblema de la Costa del Sol y se erigió como un modelo de modernidad en los años 60. Diseñó el desaparecido Hotel Meliá Tres Carabelas y las urbanizaciones La Nogalera y Playamar. Ha dejado un legado de gran valor arquitectónico, puesto que aquí se escribió una de las etapas más innovadoras del diseño urbano: la denominada Arquitectura del Relax.
Como autor del diseño de La Nogalera tuvo que abordar el reto de integrar el antiguo apeadero del ferrocarril (popularmente conocido como ‘Cochinilla’). Por estos motivos, el Consistorio buscó la inspiración del arquitecto para abordar la remodelación de la estación del tren de Cercanías, integrada en el entorno de la plaza que él mismo creó.
La urbanización La Nogalera se construyó en 1963, con un proyecto de Lamela que supuso un hito arquitectónico en la ciudad. Diseñó seis edificios altos unidos por pasarelas elevadas sobre zonas ajardinadas y comerciales. Ocupaba una superficie de alrededor de 23.000 metros cuadrados, con piscinas, locales de ocio y zonas de esparcimiento. Fue inaugurada en 1966, en la época dorada de Torremolinos, por lo que animó a numerosos empresarios a instalar allí sus tiendas.
Lamela es un reconocido arquitecto a nivel nacional e internacional. Fue el autor, entre otros proyectos, de las Torres de Colón, la ampliación del estadio Santiago Bernabeú y la terminal 4 del Aeropuerto de Barajas, todos ellos en Madrid.
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