Marina Álvarez heredó hace apenas unas semanas de Aquilino Alonso la Consejería de Salud, azotada en el último año por las protestas ciudadanas y un errático plan de fusiones hospitalarias que acabó derogado. La nueva responsable de la sanidad andaluza abogó este jueves en Acento Andaluz, el programa de Ondaluz TV, por profundizar en la “calidad del sistema y los tiempos de respuesta al paciente” como principales recetas para que el sector que tan bien conoce por su paso por la gerencia del Hospital Reina Sofía salga de una vez de la “diana” en la que ha estado atrapada últimamente.
En esa catarata de críticas han influido, a su juicio, ataques interesados desde la oposición que considera carentes “de responsabilidad, porque crean una alarma que no se corresponde con la realidad”. Sí asume la consejera por contra errores en “aspectos que habrá que mejorar” con dosis de diálogo “con profesionales y con la ciudadanía”, algo a lo que está dispuesta aprovechando la experiencia acumulada. Su objetivo, avanzó, es seguir contando con la colaboración de "los magníficos profesionales" que tiene a su cargo, a los que considera responsables de haber aguantado el tirón en los duros años de la crisis, y de limar todas aquellas aristas que dificultan su día a día. El paciente, adelantó, requiere "diagnósticos más rápidos y tiempos de espera más cortos" y también mejoras en infraestructuras, algo en lo que ya trabaja la Junta. La sanidad pública "tiene futuro", enfatizó, y de garantizar su viabilidad se encargará la nueva ley que de sostenimiento del sistema, que entre otros puntales le garantiza recursos y reniega de las privatizaciones. Sí se mantendran los conciertos con el sector privado "allí donde sea necesario", aunque la consejería "trabaja para que los servicios se oferten en el mayor porcentaje posible en los centros públicos".
El escenario, resumió, no es tan oscuro como dibujan quienes intentan desacreditar al sistema público sanitario. Álvarez defiende “resultados por encima de la media nacional e incluso de sistemas europeos” que “avalan la calidad de las prestaciones”, con ejemplos en los indicadores de listas de espera. Las últimas medidas impulsadas también contribuirán a elevar el listón. La consejera recuerda que el plan de verano reforzará centros de salud y hospitales con 17.500 profesionales más, en especial en costas de Málaga y Cádiz. Y niega, tajante, que vaya a menguar el número de camas.
Sobre la actualidad, dos apuntes: respalda las donaciones de Amancio Ortega porque contribuyen al avance en las dotaciones sanitarias y prefiere esperar al marco legislativo aún inexistente antes de pronunciarse sobre la polémica de la gestación subrogada.
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