La fragata 'Canarias' de la Armada española, desplegada en el Mediterráneo Central en el marco de la Fuerza Naval de la Unión Europea EUNAVFOR MED 'Sophia', ha participado este viernes en el rescate de más de 1.600 migrantes.
En total, ha coordinado el rescate de diez embarcaciones neumáticas y dos de madera, con aproximadamente 1.600 personas a bordo, según ha informado el Ministerio de Defensa.
A primera hora de la mañana, el buque apoyó a una nave de la ONG 'Iuventa' en las actividades de rescate de los migrantes que viajaban a bordo de una embarcación de madera, que había quedado a la deriva. Con el fin de evitar su posible reutilización, se llevó a cabo su destrucción.
Con posterioridad, la fragata recibió aviso de la salida de varias embarcaciones de la zona de Sabratah (Libia) y recibió orden del cuartel operacional de Roma (OHQ, por sus siglas en inglés) de proceder a la zona de acción del buque de la ONG 'Iuventa', donde asumió las funciones de Coordinador en la Escena de Acción con los buques disponibles, localizando un total de 11 embarcaciones con inmigrantes.
Tras esto, el buque ha continuado navegando hacia el sur para rescatar directamente una cuarta embarcación con un total de 94 personas magrebíes a bordo. Tras destruirla, el buque procedió de nuevo hacia el 'Iuventa' a fin de transferirle 121 migrantes.
Finalmente, a bordo de la 'Canarias' permanecen 651 migrantes, entre los que se encuentra un bebé en estado hipotónico con síntomas de deshidratación, por lo que se recomienda su evacuación lo antes posible.
La fragata española tiene previsto iniciar el tránsito hacia el norte a la espera de la confirmación de un puerto de desembarco de los migrantes y transferir, con urgencia médica, al bebé y a su familia en la isla de Lampedusa.
OPERACIÓN SOPHIA
La fragata 'Canarias' se encuentra desplegada en la operación EUNAVFORMED Sophia desde el pasado día 24 de enero en que relevó a su gemela 'Navarra'.
El cometido tanto de la fragata 'Canarias' como del destacamento 'Grappa' en la operación Sophia es el de interrumpir las redes de tráfico ilegal de personas que actúan a través del Mediterráneo central, llevando a cabo la búsqueda e interceptación de los barcos que trafican con personas.
Aunque las labores de salvamento no están comprendidas en el enunciado de la misión de la UE, las leyes marítimas internacionales obligan a cualquier buque o aeronave a prestar ayuda a embarcaciones y personas en riesgo en la mar.
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