En los últimos 20 años en Andalucía se han contabilizado 6.317 concursos empresariales, según el estudio 'Evolución de los procesos concursales en España', publicado por Informa D&B. La mayor parte de estos concursos, el 85 por ciento, se han producido desde el año 2009, cuando se introdujo la primera reforma de la Ley Concursal en España. En el conjunto del territorio nacional este porcentaje es ligeramente inferior, del 80 por ciento.
Los datos crecen en la comunidad andaluza desde 2009 hasta 2013, año que con 941 procesos es el que más acumula. A partir de ahí se inicia un descenso terminando 2016 con 458 concursos. En cuanto al resto de comunidades, Cataluña es la que alcanza un mayor número de procesos concursales durante estos 20 años, 14.575, el 23 por ciento del total. Madrid y Valencia se disputan desde 2013 el segundo puesto. En 2016 Cataluña sumaba el 21 por ciento de los concursos en España, Madrid casi el 16 por ciento y Valencia algo más del 15 por ciento.
En los últimos 20 años en España se han registrado 62.878 concursos empresariales, el 80 por ciento de ellos a partir del año 2009. Desde entonces han ido creciendo, alcanzando su máximo histórico en 2013, cuando se registraron 9.310, para reducirse a 4.461 al cierre de 2016, cantidad inferior a los 5.054 de 2009.
Como explica la directora de Estudios de Informa D&B, Nathalie Gianese, "los procesos concursales son todavía marginales si se compara con el tejido empresarial español y no reflejan el número total de empresa en dificultades".
La mayoría de las empresas que han iniciado concurso de acreedores acaba en liquidación o simplemente dejan de operar, aunque la tasa de supervivencia se incrementa desde 2004. De las 62.878 que iniciaron el proceso el 80 por ciento han cesado su actividad.
POR SECTORES
Por sectores, Construcción y actividades inmobiliarias es el más afectado, representando el 33 por ciento del total desde 1997. Le siguen Comercio, que supone el 20 por ciento e Industria, que también alcanza casi el 20 por ciento. Hasta 2007 el orden era el inverso: Industria era el sector con más concursos, seguido de Comercio y Construcción. En 2008 el número de procesos se incrementó significativamente en el sector de la Construcción que llegó a representar el 41 por ciento del total.
Las microempresas recurren cada vez más a los concursos: si en 1997 suponían el 51 por ciento, en 2016 llegan al 83 por ciento. Según el informe, "lógicamente" el resto de empresas pierden peso. Las pequeñas pasan del 35 por ciento al 15 por ciento, las medianas del 12 por ciento al 2 por ciento, y las grandes del dos por ciento al 0,4 por ciento.
Pero, teniendo en cuenta el número de sociedades que recurren a estos procesos respecto al total de compañías activas del mismo tamaño, las micro son las que tienen una tasa de concursalidad inferior, del 0,20 por ciento, mientras que en las pequeñas llega al 0,64 por ciento y en las medianas y grandes supera el 0, 4 por ciento.
Informa D&B añade que también ha cambiado la forma jurídica más habitual entre las empresas concursadas. Si en 1997 el 57 por ciento correspondía a sociedades anónimas, en 2016 estas son tan solo el 11 por ciento, pasando las sociedades limitadas a ser el 77 por ciento del total frente al 39 por ciento que marcaban en 1997. El porcentaje de autónomos se incrementa del dos por ciento al nueve por ciento en este periodo.
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