La ciudad de Al Bab, bastión principal del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la provincia siria de Alepo, quedó completamente asediada en las últimas horas, después del avance del ejército sirio y de sus aliados, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG destacó que los combates continúan esta mañana en la zona, en un intento de estrechar el cerco de Al Bab por parte de los efectivos gubernamentales, que están apoyados por fuerzas de elite del grupo chií libanés Hizbulá y de brigadas mecanizadas rusas.
Anoche, las tropas leales al Gobierno sirio lograron cortar la carretera que une Al Bab con el este de Alepo y las provincias de Al Raqa y Deir al Zur, con lo que la urbe está completamente incomunicada.
Durante la jornada de ayer, las Fuerzas Armadas sirias y sus aliados tomaron también el área de Uishia, que se ubica a unos cientos de metros de esa carretera.
Con estos progresos, los efectivos gubernamentales también han conseguido imponer un sitio a las poblaciones de Tadaf, Bazaa y Qabasin, dominadas por el EI y en las inmediaciones de Al Bab.
Estas operaciones del Ejército transcurren en paralelo a las de rebeldes sirios, apoyados por carros de combates y aviones turcos, que niegan que haya ningún tipo de coordinación con las autoridades sirias.
Según un mapa de la región difundido por el Observatorio, los insurgentes y las fuerzas turcas se sitúan en áreas al norte de Al Bab, mientras que las tropas gubernamentales la rodean por el oeste, el sur y el este.
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