Agentes de la Policía Local de Sevilla, adscritos a la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, han detenido y puesto a disposición judicial a cuatro jóvenes con edades comprendidas entre los 23 y 27 años como presuntos autores de un robo con fuerza en una furgoneta. A uno de los jóvenes, de 23 años, se le atribuye además un delito contra la seguridad vial al conducir bebido.
Según informa Emergencias Sevilla en su cuenta de Twitter, consultada por Europa Press, fue sobre las 7,30 horas del pasado domingo cuando un agente de la Policía Local de Sevilla que se encontraba fuera de servicio circulaba por la calle Salto Alvarado y observó a otro vehículo que iba a una velocidad "excesiva" para las características de la vía.
Esta conducta levantó las sospechas de este agente, quien, con su vehículo, comenzó a seguirle mientras solicitaba la presencia de algún patrullero de Policía Local.
Durante este seguimiento, el vehículo de los detenidos circuló a gran velocidad, rebasando incluso una señal de 'Stop' "sin la más mínima precaución" a pesar de la espesa niebla, todo ello hasta que, en un momento dado, golpeó contra el bordillo y los jóvenes detenidos dejaron estacionado el vehículo en la calle Conde de Osborne con una rueda reventada.
Tras esto, los sospechosos se bajaron del vehículo y se dirigieron hacia una furgoneta estacionada en la calle Don Juan, a la que rodearon, situándose dos de ellos en actitud vigilante mientras los otros dos manipulaban las ruedas traseras para sustraerlas, mientras que también fracturaron la ventanilla de la furgoneta, accediendo a su interior.
En este momento, el agente se identificó como policía local, emprendiendo los cuatro la huida hacia el lugar donde dejaron su vehículo estacionado, momento en el que llegaron refuerzos, de manera que, entre el primer agente y los que se personaron en el lugar, lograron la detención de los cuatro jóvenes, que fueron trasladados hasta dependencias policiales y posteriormente fueron puestos a disposición judicial.
De los cuatro detenidos, el que llegó conduciendo el vehículo, con 23 años de edad y siete detenciones anteriores, presentaba síntomas de embriaguez, por lo que fue sometido a las pertinentes pruebas de alcoholemia, arrojando un resultado positivo al duplicar el máximo permitido.
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