La Fiscalía ha denunciado a tres personas que fueron sorprendidas de noche, con detectores de metales y azadas en el yacimiento arqueológico de Montemolín, situado en Marchena (Sevilla) y al que causaron daños por valor de 5.000 euros.
La Guardia Civil localizó a los tres denunciados a las 23.40 horas del 19 de septiembre pasado a menos de treinta metros del cartel informativo de la zona cuando intentaban adueñarse de objetos arqueológicos, lo que no lograron por la presencia de los agentes, indica la denuncia de la Fiscalía, a la que ha tenido acceso Efe.
A pesar de ello, los tres denunciados, vecinos de Alcolea del Río (Sevilla), causaron daños en el yacimiento, que está declarado Bien de Interés Cultural.
Un doctor en Arqueología y Ciencias de la Antigüedad ha cifrado en 5.000 euros los daños causados al yacimiento.
Por ello, la Fiscalía le acusa de un delito del artículo 323.1 del Código Penal, que prevé penas de prisión de seis meses a tres años o multa de doce a veinticuatro meses.
Esas penas se impondrán al que cause daños en bienes de valor histórico, artístico, científico, cultural o monumental, o en yacimientos arqueológicos, terrestres o subacuáticos, y con la misma pena se castigarán los actos de expolio en estos últimos, precisa el artículo del Código Penal.
La Fiscalía ha explicado que existe una denuncia muy similar en el mismo lugar y de fechas próximas, y ha destacado el "mérito" de la Guardia Civil por detectarlo y detener a los culpables, que siempre actúan de noche en un lugar que califica de "páramo imposible de vigilar permanentemente".
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