El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado este martes que le consta que la coordinadora de la formación morada en Andalucía, Teresa Rodríguez, no está en aspirar a ocupar el 'número dos' del partido en el congreso de Vistalegre sino que "trabaja para ser la próxima presidenta de la Junta de Andalucía y tiene muchas posibilidades de serlo".
Iglesias se ha pronunciado de este modo en una entrevista en Radiocable, recogida por Europa Press, después de que el anticapitalista Miguel Urban dijera que le gustaría ver a la andaluza Teresa Rodríguez como 'número dos' del partido.
Este lunes la propia Teresa Rodríguez dejó claro que sus aspiraciones en el partido morado no pasan por situarse como 'número dos' de Podemos tras el congreso de Vistalegre. "Yo estoy la número uno de Andalucía y con eso tengo suficiente, no me voy a mover de Andalucía y cuando termine mi mandato, volveré a mi casa, a mi trabajo y la militancia de base", zanjó.
Al margen de este asunto, Iglesias ha defendido durante la entrevista que "no tendría mucho sentido" que el siguiese en el puesto si los inscritos en Podemos no están de acuerdo con sus ideas y con su equipo en el congreso de Vistalegre. "Si el documento de estrategia política más importante que se presenta en Vistalegre, el de mi equipo y mi proyecto, sale derrotado, sale derrotado, yo no puedo seguir siendo secretario general", ha dicho.
Las palabras de Iglesias coinciden con su propuesta de que en Vistalegre las propuestas políticas y organizativas se voten de manera conjunta a las candidaturas --y que los partidarios de las ideas de Íñigo Errejón denuncian que equivale a convertirlo todo en un plebiscito sobre el liderazgo--.
El líder 'morado' ha defendido que él no quiere ser "secretario general a toda costa" ni que le voten por su "cara bonita", sino sólo si los inscritos están de acuerdo con su equipo y con su proyecto. De hecho, ha admitido que, dado que nadie quiere competir con él por el puesto, tendría fácil seguir en el puesto, pero no quiere salvo que se apoyen sus ideas.
A su juicio, "no es bonito que alguien aspire a un cargo independientemente de los documentos o las ideas" que le toque llevar a cabo, aunque sean "complementarias" a las suyas. Además, cree que votar las ideas asociadas a los proyectos supone "terminar con cierto personalismo que ha sido característico de Podemos".
Para Iglesias, lo que los inscritos quieren es que sus dirigentes no se peleen, sino que trabajen juntos, y ha aprovechado para decir que eso es lo que promueve el modelo de votación de candidaturas que ha propuesto el secretario de Organización, Pablo Echenique, por encargo suyo.
El sistema, ha defendido, premia los acuerdos y las minorías, porque "Podemos no tiene que ser un espacio de correlaciones de fuerzas entre familias, sino un espacio donde se respete a las minorías y a los círculos.
LOS FUTUROS CARGOS DEPENDERÁN DE LA DIRECCIÓN
En todo caso, ha recalcado que "la cuestión de los cargos la tendrá que decidir la dirección". En este ámbito, preguntado si relevará al actual 'número dos', Íñigo Errejón, ha insistido que "en ningún caso", y ha añadido que eso no será decisión suya, sino que toda la responsabilidad "dependerá de la nueva dirección".
En todo caso, ha insistido en que él quiere contar con Errejón, igual que con otros dirigentes como Carolina Bescansa, Pablo Echenique, Miguel Urban o Irene Montero.
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