En una entrevista con Efe, Isabel Santaularia explica que se trata de un ensayo realizado a partir del material que lleva cinco años recogiendo de los cursos de máster y de las clases del campus en línea que ha impartido en la UdL sobre esta figura de la ficción.
“En los años cincuenta los personajes de las películas de miedo eran monstruos como Drácula, pero hoy en día el asesino en serie es uno de los principales protagonistas de ficción, un personaje que además se basa en muchos casos en asesinos en serie que han existido en la vida real”, explica la profesora.
De esta manera, según Santaularia, muchos asesinos en serie, tanto los de ficción como los que han existido de verdad, se han convertido en auténticos iconos a nivel mundial, en especial entre los adolescentes.
“Hay fenómenos que hacen iconos no sólo de personajes de la ficción sino, sobre todo, de asesinos reales.
He llegado a ver incluso páginas web en las que se venden objetos utilizados por asesinos en serie de verdad, como si fueran actores de cine. También son muy conocidos los casos de mujeres que se cartean con asesinos que están en prisión. Hay una verdadera admiración por este tipo de personas y personajes”, explica la profesora.
Esta admiración, “el morbo” que despiertan estos personajes, se traduce en numerosos productos de ficción basados en los asesinos en serie, tantos que incluso se pueden hacer categorías y subgéneros. Así, según el análisis de Santaularia, se pueden distinguir tres: los thrillers, el psico-horror y los slashers.
Los thrillers son el género más conocido en los que en realidad el personaje principal no es el asesino en serie, según la profesora, sino el detective que lo persigue, que hace el personaje del héroe.
“Aquí no importa tanto el asesino sino el proceso que se sigue para dar con él”, señala.
En cuanto al género del psico-horror, según Santaularia se centra en mostrar la mente del asesino como protagonista principal, dando a conocer su mentalidad.
Por último, los slashers son las películas en las que el psicópata va eliminando a los miembros de un grupo de adolescentes. “Aquí se ha creado incluso un subgénero que es el de las películas que los parodian como Scream o Scary Movie”, señala.
Entre los asesinos de ficción más destacados Santaularia pone en primer lugar, según una clasificación personal, a John Doe, de la película Seven.
“Es el más emblemático. Dicen que es el mejor thriller que se ha hecho hasta ahora y estoy de acuerdo, ninguno lo ha superado”.
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