El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha dicho este lunes que el agente de la Guardia Civil encarcelado por su implicación en la presunta violación de una joven durante las fiestas de San Fermín en Pamplona, junto a otros cuatro detenidos, todos naturales de Sevilla, ha sido apartado del servicio y "se están tomando las medidas internas disciplinarias" con independencia del procedimiento judicial que se está llevando a cabo para dilucidar el suceso.
En declaraciones a los periodistas en Sevilla, previas a un acto para reconocer la labor de Guardia Civil y Policía Nacional en el Plan Director, Sanz ha explicado que el agente había terminado su periodo de formación recientemente y acababa de incorporarse al servicio, "aunque estaba pendiente de su destino".
En este sentido, ha puntualizado que "habrá que acompasar ambos procedimientos", en referencia a la investigación judicial y las medidas disciplinarias aplicadas en el ámbito interno de la Guardia Civil.
Asimismo, ha dejado claro que este suceso "traerá consecuencias" para el agente, como la apertura de expediente, las sanciones correspondientes y la separación del servicio. Además, ha hecho hincapié en que "habrá que esperar un tiempo" para esclarecer los hechos con independencia de lo que ya hay en curso en el procedimiento de la investigación.
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