La titular de este departamento, Clara Aguilera, consideró "positiva" la activación de esta medida de regulación de mercado, que desde hace meses venía demandando el Gobierno de Andalucía para ayudar al sector olivarero ante las dificultades que está atravesando en la actualidad por la caída de los precios, según explicó en un comunicado la Administración.
Desde que la Comisión anunciase, el pasado 25 de mayo, su disposición a aprobar este mecanismo, la Consejería ha manteniendo varias reuniones con el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), encargado de la coordinación a nivel nacional de los organismos pagadores, con la finalidad de establecer el procedimiento que se llevará a cabo a partir de ahora.
En este sentido, la consejera aseguró que "en Andalucía todos los mecanismos administrativos necesarios están ya preparados para gestionar y controlar las ayudas".
El periodo para presentar las licitaciones se ha establecido en dos convocatorias, la primera del 1 al 6 de julio y la segunda del 7 al 16. Los operadores interesados en solicitar las ayudas al almacenamiento deberán hacerlo, una vez abierto el plazo, en sus correspondientes delegaciones provinciales.
El documento fija en 110.000 toneladas la cantidad máxima total de producto (aceite de oliva virgen extra y aceite de oliva virgen) que se puede beneficiar de la ayuda y en 180 días el periodo de almacenamiento. A este respecto, si fuera necesario, la Junta solicitaría la ampliación de este plazo de tiempo.
El Reglamento, que se publicará a finales de mes, recoge además, entre otras cuestiones, que los operadores, que sólo pueden estar establecidos en España, Italia, Grecia, Francia y Portugal, deberán pedir como mínimo el almacenamiento de 50 toneladas de aceite.
La titular de Agricultura y Pesca confía en que esta medida mejore y alivie la situación del sector, aunque recuerda que "ésta es una medida coyuntural que ahora debe ir acompañada con otras estrategias de futuro como son la concentración de la oferta y la promoción del producto para consolidarnos en los mercados".
La reacción de las organizaciones agrarias
El objetivo la tractorada celebrada en Jaén, la mayor de la historia de Andalucía, según COAG, era reclamar la aceleración de todos los trámites para la puesta en marcha del mecanismo de almacenamiento privado del aceite, decisión adoptada ayer por el Comité Técnico de la Unión Europea y que según la organización agraria en el mejor de los casos no podría entrar en funcionamiento hasta agosto.
COAG-Andalucía recordó que esta movilización, que cuenta con el apoyo de la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (Faeca), pretende denunciar la situación de crisis que atraviesa el sector del olivar andaluz.
Una situación que, según la COAG, "no está provocada por razones de mercado sino por la acción especulativa de unos pocos grupos que controlan las operaciones y, en consecuencia, los precios del aceite" y que, en lo que va de año, ha provocado que las pérdidas para el sector olivarero andaluz superen los 600 millones de euros.
Esta organización agraria también propueso que se estudien otras medidas que pueden ayudar a combatir la crisis de precios del aceite, tales como el desvío para usos industriales del producto de menor calidad como el de orujo o la pignoración de créditos.
Sin embargo, lo fundamental para sucesivas campañas es que se realicen las gestiones políticas necesarias para actualizar (al menos, hasta un mínimo de 2,40 euro/kilo) los niveles que desencadenan el almacenamiento privado, establecidos hace más de una década, y que no responden a las actuales circunstancias de producción.
Similar valoración a la de COAG realizaron Asaja y UPA, al considerar positivo que la activación del mecanismo del almacenamiento privado de aceite de oliva 'virgen' y 'virgen extra' durante un período de seis meses y con un tope máximo de 110.000 toneladas, para hacer frente a la caída "significativa y prolongada" de los precios en el mercado comunitario, aunque destacaron que "no es una solución total".
Así, el técnico en temas de aceite de Asaja José Vázquez valoró la medida pues podría ayudar a la recuperación de los precios del sector que "continúan hundidos", aunque destacó que "no es la única medida".
"El efecto psicológico de esta medida que será más real cuando se aplique va a permitir que los precios inicien una recuperación más clara", subrayó, a lo que añadió que "no va ser la solución total pero va a ayudar".
Por último, indicó que aunque se pedía más cantidad de aceite y más tiempo, "los seis meses también tendrán un efecto aunque no sea igual al que tendría si fuera un año".
Por su parte, UPA-A valoró la activación del almacenamiento pero consideró que será "poco relevante" para recuperar el precio del aceite de oliva en un sector aquejado de la mayor crisis de precios en origen de las últimas décadas, al tratarse de un dispositivo "desfasado, no actualizado y poco operativo".
"Tampoco -añadió- será un proceso rápido, puesto que tendrá que ponerse en marcha el proceso de licitación pertinente, por lo que la inmovilización del aceite y la solicitud de las ayudas no serán efectivas hasta después del verano".
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