Autoridades y trabajadores municipales han participado hoy, miércoles, en una concentración de protesta ante una nueva muerte por violencia machista, en este caso en Zaragoza. El número de víctimas mortales por violencia de género en España en lo que va de año asciende ya a doce.
Como cada vez que se registran estos hechos, se ha guardado un minuto de silencio tras una pancarta con el siguiente texto: “¡No más asesinatos de mujeres. San Roque contra todo tipo de violencia de género”.
En el Pleno Ordinario celebrado el 29 de noviembre de 2012 se aprobó por unanimidad una moción de toda la Corporación contra la violencia machista. En ella se decidía que tras cada muerte de este tipo registrada en España se organizara una concentración frente a la Casa Consistorial y se guardara un minuto de silencio de condena. Este compromiso se renovó en el Pleno Ordinario de la Corporación correspondiente al mes de octubre de 2015.
El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha participado en esta concentración, al término de la cual ha manifestado que “desgraciadamente en lo que va de año 2016 ya tenemos al menos once víctimas de violencia de género en España. Un nuevo asesinato, un nuevo caso de terrorismo doméstico, que sigue siendo una de las asignaturas pendientes de nuestra sociedad”.
“Creo -continuó- que todo el esfuerzo que están realizando las administraciones no puede quedar en saco roto y tenemos que seguir realizando tareas de prevención para que lo antes posible esta realidad sea cosa del pasado, que no vuelvan a repetirse casos de violencia de género. Son ya demasiadas las víctimas, y este terrorismo doméstico causa más muertes que cualquiera de los otros terrorismos que ha sufrido nuestro país y el mundo entero. Espero que llegue el día en que no sea necesario seguir realizando estos minutos de silencio”.
Miguel Rubén M.P. mató de un tiro en la cabeza a Soraya G.S., la camarera de Zaragoza de 37 años con la que había estado saliendo este vecino de Medina del Campo (Valladolid) y a la que asesinó el lunes en el interior del bar en el que trabajaba la joven. Él también se suicidó de un único disparo en la cabeza.
Previamente se había dictado una orden de alejamiento por una agresión anterior, pero al residir él a 400 kilómetros de su víctima la orden no conllevó una vigilancia integral, lo que aprovechó para asesinar a su expareja.
Tras confirmar las muertes por violencia machista de tres mujeres en Becerreá (Lugo), Fuengirola (Málaga) y Valencia, las víctimas en 2016 ascienden a 12. En enero se produjeron ocho supuestos asesinatos de mujeres por parte de sus parejas. En 2015 sumaron 56.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es