Las principales tendencias identificadas en el sector TIC andaluz, que se encuentra en convergencia con el sector a nivel nacional e internacional, se centra especialmente en el ámbito de la Electrónica Profesional, y especialmente en lo denominado 'Inteligencia Ambiental' (desarrollos tecnológicos que permiten que la producción y gestión de recursos durante su ciclo de vida sea sostenible, competitiva y flexible), y en el que las empresas andaluzas tienen un papel relevante en plataformas como Prometeo (Plataforma Tecnológica Española de Sistemas con Inteligencia Integrada), o ESEC (Plataforma Española de Tecnologías para la Seguridad y Confianza).
Asimismo, el papel de empresas andaluzas con proyección internacional es destacado, entre las que habría que subrayar las compañías principalmente situadas en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), ubicado en Málaga, que desarrollan Nuevas Redes de Acceso (NGA), especialmente en el ámbito de las redes inalámbricas (como WiMAX), y que participan activamente en la Plataforma Tecnológica de Comunicaciones Inalámbricas (EMOV).
Entre las tendencias más innovadoras de las empresas andaluzas se encuentran las relacionadas con la nanoelectrónica, especialmente por el trabajo desarrollado desde las universidades públicas y los grupos de investigación andaluces, así como con la domótica, desarrollando proyectos europeos bajo el marco del programa I+D ITEA (Information Technology for European Advancement).
En cuanto a datos estadísticos, los principales segmentos de actividad del sector TIC andaluz se centran en servicios asociados al sector de las TIC (29% de la facturación global) y en la industria de las tecnologías y sistemas de información (con un 24%), seguido de el área de componentes y dispositivos electrónicos (con un 16%).
1.374 firmas dedicadas a las tic
Los últimos datos que se poseen del sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación proceden del informe 'Análisis del Sector TIC 2007', elaborado por la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa y la asociación de Empresarios de Tecnologías de la Información y Comunicación (Eticom), que recoge cómo Andalucía se ha situado como la tercera comunidad, en número de empresas del sector TIC, con un total de 1.374 firmas, que suponen el 10,37% del total de las empresas que hay en España, sólo por detrás de Madrid (28,55%) y Cataluña (24,02%) en este tipo de tejido productivo.
El informe recoge también los datos de facturación del sector en Andalucía, que el pasado año alcanzó los 4.609 millones de euros (el 7,3% del total nacional), lo que supone un incremento del 14,75% con respecto al ejercicio anterior. Este importante ritmo de crecimiento prácticamente triplica el registrado a nivel nacional, que se situó en el 5%.
El incremento alcanzado en otros indicadores del sector también ha seguido la misma tendencia, como en el empleo, que ha crecido un 14,2% frente al año anterior hasta alcanzar los 33.895 empleados en Andalucía, aproximadamente el 15% del total del empleo directo en el sector en toda España. Por lo que respecta al perfil de estos trabajadores, el 68% de los empleados son titulados universitarios.
El tejido empresarial TIC andaluz se concentra principalmente en dos provincias, Sevilla y Málaga, con un 35,5% y un 29,3% del total de empresas de la comunidad, seguidas de Granada (10,4%), Cádiz (7,2%), Córdoba (6,5%), Almería (4,8%), Jaén (3,4%) y Huelva (2,9%).
Inversión en i+d+i
La inversión en actividades de Investigación y Desarrollo también es un dato característico de este sector, ya que un 62,3% de las empresas que lo componen realizan habitualmente actividades de I+D+i, y un 78,1% de las mismas perciben que estas actuaciones suponen incrementos medios o altos en su facturación.
Por lo que respecta a la inversión en I+D en las empresas de este sector, alcanzó en 2007 los 172,5 millones, lo que representa el 3,7% del total nacional. Con esta cifra la comunidad se sitúa en séptima posición tras Madrid (1.684), Cataluña (1.136), País Vasco (738,7), Galicia (221), Comunidad Valenciana (203,4) y Castilla y León (185).
En el capítulo de la internacionalización, el 27,4% de las empresas TIC andaluzas reconocen que vienen desarrollando actuaciones en otros países. Así, prestan servicios como e-learning, abarcando especialmente el mercado sudamericano, y forman un nutrido grupo en la plataforma INES (Iniciativa Española de Software y Servicios).
Foro tic y sostenibilidad
La importancia que este sector posee para la economía andaluza y nacional se ha puesto en evidencia en el reciente II Foro TIC y Sostenibilidad, organizado junto con la Asociación de Empresas de Electrónica, Tecnología de la Información y Telecomunicaciones de España (Aetic), en el que Administraciones públicas, instituciones y la industria del sector TIC, ha apostado por la sostenibilidad como “proyecto unitario en la construcción de un nuevo modelo productivo innovador y sostenible para Andalucía”.
Esta segunda edición, bajo el título ‘Innovación y sostenibilidad en tiempo de crisis’, pretende consolidar, con carácter permanente, el debate acerca de la contribución del sector TIC a un “óptimo” desarrollo de la Sociedad de la Información “en un mundo sostenible liderando un papel protagonista y de cambio en los hábitos y patrones de consumo”.
En su inauguración, la secretaria general de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta, Pilar Rodríguez, ha apostado por la sostenibilidad y las TIC para impulsar el nuevo modelo productivo andaluz, además de perfilarse como “valor estratégico y determinante” ante la actual crisis económica.
En este sentido, Rodríguez indicó que, por sus posibilidades, su transversalidad y su alcance el sector TIC está orientado a un modelo de negocio que “entiende la sostenibilidad en su sentido más amplio”, integrando en un proyecto “unitario las necesidades presentes y futuras de la economía, la sociedad y el medio ambiente”.
Desde el punto de vista económico, añadió que la aplicación de las TIC se presenta actualmente como un modelo de negocio que ha de dotar de valor añadido a la actividad empresarial para que los sectores productivos estratégicos sean competitivos y ecológicos.
Dinamizador de otros sectores
De esta manera, esperó que el sector TIC funcione como dinamizador de otros sectores productivos e importantes de la economía, por tanto, “su impulso y su influencia transversal son relevantes y estratégicos en la actual crisis económica”. En Andalucía estos ámbitos preferentes son el energético, biotecnológico, agroalimentario, metalmecánico o aeronáutico.
“Desde la perspectiva social, las tecnologías, en su dimensión humana, han de ponerse al servicio de las personas y del bienestar social”, indicó Rodríguez, afirmando que es en esta dimensión en el que las TIC juegan un papel “primordial” en la incorporación de cambios en el uso de las infraestructuras, del modo de relación y en los comportamientos y objetivos de las empresas.
“El propio sector basa su actividad en un planteamiento en sí mismo sostenible ya que recoge las nuevas necesidades y oportunidades de negocio que generan la recuperación, la redistribución y la reutilización de equipos tecnológicos”, señaló.
Entre otros objetivos, el Foro plantea el protagonismo del sector TIC como agente reductor del consumo energético, en cuanto a la influencia en otros sectores decisivos de la economía para que sean más eficientes, así como para que la industria modifique su modelo productivo y pase a ser más sostenible.
El 44% de los proyectos apoyados por IDEA comprometían la incorporación de TIC
El 44% de los proyectos apoyados por la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa a través de la Agencia IDEA mediante la Orden de Incentivos para el Fomento de la Innovación y el Desarrollo Empresarial de Andalucía de 2005 y 2007 comprometían la incorporación de TIC y servicios avanzados en empresas. Fueron 3.600 los proyectos apoyados, que sumaron un incentivo de más de 43 millones de euros. En total, IDEA apoyó la puesta en marcha de 7.885 nuevos proyectos empresariales con incentivos por valor de 685,09 millones de euros, que han generado 21.976 empleos y una inversión empresarial de más de 3.800 millones de euros.
La actual Orden 2009-2013 cuenta con una dotación de 1.500 millones de euros. El nuevo programa de incentivos continúa primando la innovación, la investigación y desarrollo y la cooperación empresarial, como factores estratégicos sobre los que fundamentar el desarrollo empresarial y económico de Andalucía, al tiempo que incorporará nuevas fórmulas de apoyo al tejido productivo acordes con la actual crisis económica.
Por su parte, la Corporación Tecnológica de Andalucía ha apoyado 60 proyectos del sector, con una inversión movilizada de 44,81 millones y un nivel de incentivos que alcanza los 13,30 millones de euros, que han beneficiado a 48 grupos de investigación.
Los sectores de alta tecnología ocupan a más de 126.000 personas, con un incremento del 20%
Los sectores de alta tecnología emplean ya en Andalucía a más de 126.000 personas, y la comunidad ocupa ya el cuarto puesto del ranking nacional sólo por detrás de Cataluña (391.400), Madrid (322.700) y País Vasco (128.700).
El crecimiento del empleo en las empresas del sector manufacturero de alta tecnología se ha incrementado más de un 20% en el último año, y en las firmas del sector servicios de alta tecnología, con un aumento del 12,2%. En términos generales, el incremento fue un 2,5% más que el ejercicio anterior.
Estos datos, los últimos disponibles del Instituto Nacional de Estadística (INE) su en Indicador de Alta Tecnología 2007, señalan que Andalucía cuenta con 126.200 personas empleadas en sectores de alta y media-alta tecnología, tanto manufactureros como de servicios, lo que representa el 3,9% del total de ocupados de la economía andaluza. Las empresas manufactureras de alta y media-alta tecnología emplean en Andalucía a 67.600 trabajadores y las de servicios a 58.600 empleados.
Respecto al tipo de empresas, de las 1.374 firmas tecnológicas de la región, el 65% son microempresas (menos de diez empleados), el 21,8% son pequeñas y medianas empresas (entre 10 y 50 empleados), el 10,6% son empresas con entre 50 y 250 trabajadores, y el 1,9% son empresas con más de 250 empleados.
El sensor autónomo de Anafocus
Nacida de la experiencia de tres investigadores del Instituto de Microelectrónica de Sevilla (Ángel Rodríguez Vázquez, Fernando Medeiro y Rafael Domínguez Castro) y con la aportación de uno de sus alumnos, Rafael Romay, nace en septiembre de 2001, como spin-off, Anafocus, una empresa especializada en el diseño de circuitos microelectrónicos, es decir, de chips, aunque la especialidad principal de Anafocus son los circuitos integrados: en un solo chip integran toda la tecnología de las cámaras sensoras de imagen, produciendo aparatos más funcionales, más pequeños, más compactos y, desde luego, más baratos. Su sensor autónomo, uno de sus éxitos, permite una visión inteligente con la novedad de tener capacidad de interpretar las imágenes en un sólo circuito integrado.
Sin abandonar su espíritu innovador (poseen varias patentes, algunas de ellas en trámites, y estudian presentar más tras analizar el trabajo de investigación del año), sus sensores autónomos tienen una gran aplicación en el mercado, como reconoce Rafael Romay, que van desde la robótica miniaturizada a los vehículos no tripulados, pasando por la vigilancia/seguridad inteligente, pero su principal destino actual está en los fabricantes de cámaras industriales, que son “los que están más acostumbrados a la innovación”, aunque Romay reconoce que es posible que en un futuro pueda estar implantada en los equipos electrónicos de consumo más comerciales.
Como todo en esta vida, la salida al mercado de este tipo de chip integrado requiere muchos viajes, muchos contactos y muchas ferias tecnológicas en las que explicar los avances tecnológicos, las aplicaciones y que la empresa “es capaz de hacer cosas”. Anafocus ya ha conseguido la fidelización de algunas de las principales empresas dedicadas a la fabricación de cámaras y que sean sus clientes, principalmente, empresas japonesas, uno de los grandes mercados del sector electrónico, aunque también mantienen contactos comerciales con compañías tanto de Estados Unidos como de Europa.
A pesar de esta internacionalización de la actividad empresarial de Anafocus, Romay quiere dejar claro que nunca se han desvinculado de la universidad. Continúan trabajando con el Instituto de Microelectrónica de Sevilla, dependiente del CSIC, donde colaboran sus tres socios fundadores, mientras que mantienen una estrecha relación con los grupos de investigación universitarios y con sus proyectos de investigación.
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