Definitivamente la sensación es que ni quienes deben impulsar y trabajar por una nueva candidatura a Patrimonio Mundial de la Catedral de Jaén están por la labor. La apatía y el conservadurismo jienense fraguado a lo largo de siglos de historia pesa y una vez más, si la solución es esperar que vengan de fuera a sacarnos las castañas del fuego, estamos apañados. El catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Jaén, Pedro Galera, confirmó ayer que los 12.000 euros que BMN Caja Granada comprometió a través de un convenio anunciado por el exalcalde José Enrique Fernández de Moya para financiar el congreso sobre la Catedral y que se desarrollaría en primavera, no han llegado a la Universidad, por lo que Galera ha paralizado las gestiones con los expertos que ya estaban contactados. Con un presupuesto total de 38.000 euros y sin noticias de esa tercera parte de la financiación, el ambicioso congreso se difumina tanto como la posibilidad de rearmar la candidatura de la seo jienense. Está claro que sin un liderazgo el fracaso está asegurado y al Ayuntamiento no se le ve muy entusiasmado. Ojo, y mal camino llevaremos si en todo cuanto se haga debe estar al frente el alcalde. Afloran las carencias de una lista electoral de remiendos, sin actitud en su mayoría, fruto del candidato, ya diputado, que un mes antes de las elecciones decía en este mismo periódico: “Me quedo para dar la cara”.
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