Andalucía

El grupo Ángel Camacho cierra su fábrica de aceituna de Argentina

Las dificultades para exportar la producción llevan a la clausura de la fábrica abierta en 2010 y que se ha puesto en venta. El grupo agroalimentario apuesta, en paralelo, por crecer en EEUU, su primer mercado: toma el control total de Mario Foods, la filial que compartía con el grupo local Westin

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  • planta de morón (Sevilla) -

Grupo Ángel Camacho, uno de los principales grupos agroalimentarios de Andalucía con marcas como las aceitunas Fragata o las mermeladas La Vieja Fábrica ha vivido un intenso año 2015 con múltiples cambios en su estructura de negocio fuera de España. Pero también en la estructura de poder interna de esta empresa familiar con sede en Morón de la Frontera (Sevilla, ver texto adjunto).

En cuanto al primer aspecto, las novedades más relevantes se han producido en Argentina y en EEUU. En el país suramericano, la empresa decidió en mayo del año pasado, según la información facilitada por Ángel Camacho a Información, cerrar su planta de procesado y envasado de aceituna. Y ponerla en venta.

La compañía andaluza abrió esta planta en 2010 y desde allí exportaba a EEUU, Brasil y otros países del Mercosur (alianza comercial suramericana).  “Los problemas que hemos tenido en Argentina son los mismos que otras empresas españolas que se dedican a la exportación en este país. Son problemas provocados por la regulación argentina. Teniendo en cuenta que a pesar de  nuestros esfuerzos no hemos podido solventar estos problemas y que la inversión en Argentina no encajaba en nuestro plan estratégico 2014-2016, decidimos cesar la actividad y poner en venta las instalaciones”, señalan fuertes del grupo.

La factoría se ubica en la provincia de Mendoza, fronteriza con Chile y con fácil acceso al puerto de Valparaíso en este último país. Las cifras muestran el esfuerzo económico hecho por el grupo para tratar de mantener su actividad en este país. Entre 2013 y 2015, la matriz española apoyó a la filial argentina con tres créditos (uno cada año) que suman 1,76 millones de euros. Sólo en 2014 (último año del que se dispone de cuentas anuales), Argentina aportó al grupo pérdidas por 2,2 millones.

Compra de Mario Foods

La decisión de cerrar la planta de Argentina sigue a la que ya tomó otro de los grandes grupos aceituneros andaluces (y españoles), la cooperativa Agro Sevilla. Clausuró su planta en el país en 2012 y centralizó sus operaciones en suramérica en la otra fábrica que tiene en Chile. Con ello, sólo el grupo Aceitunas Guadalquivir (también con sede en Morón de la Frontera) mantiene fábrica en Argentina.

En paralelo, hay mejores noticias procedentes de Estados Unidos, “un mercado prioritario y estratégico donde queremos desarrollar aún más nuestras marcas”. Ángel Camacho ha adquirido durante el pasado año el 50% que no controlaba en la filial Mario Camacho Foods. El importe de la operación no ha sido facilitado. Mario Foods es una de las tres marcas de aceituna líderes en EEUU, y la empresa española se alió con Mario hace siete años creando una sociedad participada a medias que ahora es ya íntegramente propiedad de Ángel Camacho.

“Con esta compra reforzamos nuestra posición y nos convertimos en la única empresa española con marca reconocida de aceitunas en EEUU, el resto se dedica a las marcas de la distribución”, o marca blanca, explican las fuentes de la compañía. El otro accionista de Mario Foods era la empresa familiar estadounidense Westin Group. EEUU aporta alrededor de 100 millones de euros a los ingresos de Ángel Camacho, sobre 200 millones en total.

Camacho Álvarez asume todo el poder

Junto a las operaciones corporativas en Argentina o Estados Unidos, las cuentas de Grupo Ángel Camacho del año 2014 recogen un cambio muy relevante en cuanto a la organización del poder en la empresa familiar sevillana. Se ha suprimido el consejo de administración, en el que se sentaban las dos ramas de la familia Camacho (los Camacho Álvarez y los Camacho Perea) que controlan la compañía. Y se ha nombrado como administrador único, y por tanto la persona que concentra todo el poder ejecutivo, a Ángel Camacho Álvarez.

“Los accionistas en Junta General han decidido que es la mejor forma de gobierno para una empresa familiar bien avenida”, señalan fuentes de la compañía. Este movimiento es similar, salvando las distancias de tamaño y sector, al que se produjo en Cepsa cuando fue adquirida por el fondo árabe Ipic: una sola persona es ahora el administrador único.

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