La sanluqueña Graziela Rodríguez debutó como preparadora de caballos en el Hipódromo de Dos Hermanas. Lo hizo con el caballo Goldin Boy,que tuvo la monta de Iván Borrego, en una prueba donde cruzó la línea de meta en penúltima posición.
De todas formas, la ya ex amazona de la Ciudad de la Manzanilla hace un buen balance positivo de su estreno porque “fue una puesta a punto de un caballo que llevaba tres años sin competir. Se notó que ha estado mucho tiempo sin correr. Espero mucho más de este caballo”.
Graziela Rodríguez, que también prepara otra yegua, espera tener más equidos en un futuro, en lo que es una nueva andadura en su trayectoria hípica. Reside en Dos Hermanasy este hecho le facilita el trabajo al no tener que desplazarse desde Sanlúcar de Barrameda. Su vida ha dado un importante vuelco porque “ya dejo de ser amazona y al dar el paso para convertirme en preparadora ya soy profesional”.
Añade que “la posibilidad de volver siempre existe y lo mío no es un problema de peso, ni muchísimo menos, sino que ya tengo que mirar por mi futuro y porque el mundo de los caballos siempre me ha atraído”. No deja de reconocer que “ha sido un año complicado para el turf porque hemos estado mucho tiempo sin competiciones. Eso ha afectado muchos a los preparadores, jinetes, amazonas y propietarios, entre otros”.
Como es lógico echará de menos competir en el litoral sanluqueño: “Son 10 años seguidos en las playas de mi ciudad. La próxima vez participaré como preparadora y no como amazona”. Graziela Rodríguez confía en el que el año 2016 sea muy positivo, aunque está vez verá los toros desde la barrera y no desde el albero.
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