El alcalde, José Ignacio Landaluce, informó ayer de que las obras de la casa de acogida La Esperanza, en la barriada de Pescadores, han entrado en la recta final y que se prevé que el edificio pueda estar en uso antes de fin de año. “Se trata de una magnífica noticia, vinculada a nuestro compromiso social de atención a los sin techos, y es que ya podemos anunciar que la casa de acogida de Pescadores estará en pocos días en disposición de poder reanudar la importante labor social que venía desarrollando”, manifestó.
Según explicó el alcalde, ya han llegado las vigas perimetrales para el refuerzo de la estructura del edificio, mañana llegarán los pilares cilíndricos que tendrán la misma finalidad, y su colocación se prevé que esté concluida a finales de la próxima semana. A partir de ahí solo quedará por terminar la pintura interior de las zonas afectadas.
Landaluce se refirió a que ha sido un trabajo arduo desde que el Ayuntamiento tuvo noticias de los problemas del inmueble y decidió hacerse cargo de la reparación del mismo, lo que conllevó la firma de un convenio con el Obispado de Cádiz, propietario del edificio, además de la realización de una serie de estudios para detectar los problemas y determinar las soluciones más idóneas, la redacción del proyecto y la adjudicación de las obras.
Durante los últimos meses, se han realizado obras para recalzar la cimentación, reparar los muros interiores y exteriores, y reponer la solería, quedando pendiente la instalación de una estructura metálica que ha sido necesario fabricarla en una empresa especializada de Vejer.
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