El primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Cádiz, Martín Vila, exige a la Junta de Andalucía que escuche a los comerciantes de los bajos de la Residencia de Tiempo Libre y a los usuarios del pabellón polideportivo sito en los bajos del edificio y no anteponga “hacer caja y vender patrimonio a costa de que cierren establecimientos de la zona”.
En esta línea, confía en que el delegado de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, “no rehuya el diálogo y se reúna con los comerciantes que tienen sus establecimientos en los bajos de la Residencia de Tiempo Libre, escuchando sus reclamaciones y solicitudes”.
A su juicio, la Junta “lo que busca es hacer caja con la operación que tiene planteada y es lícito, pero no lo compartimos. Aún así, mientras no se lleve a cabo ninguna actuación sobre el edificio, lo que pedimos junto a los usuarios del pabellón y los comerciantes de la zona es que puedan seguir desarrollándose actividad en esos bajos y en el pabellón”.
Martín Vila critica que el Gobierno andaluz argumente que el pabellón está deteriorado para intentar cerrarlo indicando que los posibles compradores querrían tener el edificio vacío cuando “aún se encuentra trabajando allí la Policía Autonómica”.
El concejal de Urbanismo incide en que, a petición de la Asociación de Fútbol Modesto –usuaria del pabellón--, técnicos municipales han solicitado hace 11 días entrar en el pabellón para comprobar el deterioro que alega la Junta de Andalucía para justificar su intención de cerrarlo y se les ha negado la entrada. Esto supone, en palabras del primer teniente de alcalde, “una incongruencia del Gobierno andaluz, ya que si realmente el estado del pabellón es de deterioro, no debe haber problema para que los técnicos comprueben el estado del equipamiento”.
Por otra parte, Martín Vila incide en que "si es importante la creación de empleo igual de importante es no destruir el actual y con este propósito, la Junta lo que hace es poner dificultades a los establecimientos de hostelería..."
Por último, y confiando en que la Junta de Andalucía “reconsidere su postura”, Vila lamenta que, de momento, el Gobierno andaluz “esté anteponiendo sus ansias de especular en la Residencia de Tiempo Libre a darle servicio a la ciudadanía que desarrolla su actividad en los bajos del edificio”.
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