Agotados, abatidos, desilusionados... Los trabajadores y alumnos de La Cónsula están viviendo una situación “insostenible”. Seis mensualidades sin cobrar y el obstáculo de una tramitación administrativa que no acaba de culminar.
El papeleo para su integración definitiva en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) requiere de una serie de pasos ineludibles que hay que realizar, pero este tiempo de espera que les exige la Junta de Andalucía hasta la resolución del conflicto es una auténtica travesía en el desierto para los integrantes de la escuela de hostelería malagueña, que acumulan numerosos salarios impagados y mucha desazón y desesperanza.
Por ello, los trabajadores de La Cónsula han convocado paros parciales desde hoy martes en el restaurante (de 14.00 a 16.00 horas) hasta el próximo 17 de diciembre, cuando se suspenden las clases con motivo de las vacaciones navideñas, por lo que no ofrecerán el servicio de almuerzo.
Según la portavoz de La Cónsula, María Luisa Vargas, esta huelga parcial viene motivada por la imposibilidad de ofrecer un servicio adecuado en el restaurante. Los problemas con los proveedores han desembocado en la falta de muchos productos que conforman su carta, lo que impide dar un nivel de calidad a la clientela de La Cónsula.
Esta situación afecta al horario de prácticas de los 88 alumnos que integran la escuela de hostelería malagueñas, que han decidido llevar a cabo un encierro hasta que “tengamos una solución definitiva” por parte de la Administración andaluza.
Nelson de Arcos, alumno de segundo curso de cocina, asegura que el año pasado ya perdieron cuatro meses y medio de clases, lo que representó un 60 por ciento menos de prácticas, y ahora, por el “camino que vamos, será igual”. “El desgaste que estamos padeciendo todos, profesores y alumnos, es insoportable”, agrega.
Este encierro en sala por parte del alumnado obligó a cancelar todas las reservas previstas para ayer lunes en el restaurante.
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