La seis asociaciones andaluzas de bebés robados ultiman los detalles de sus reivindicaciones para solicitar a la Junta y a los partidos políticos de la comunidad "justicia y reparación", ayuda para localizar a sus familiares y desmontar una "trama" que "silenció" el franquismo y no resuelve la democracia.
Los afectados por el robo de niños entre 1940 y 1990 se reúnen mañana en el Parlamento autonómico en la I Jornada de Asociaciones de Bebés Robados en Andalucía, reunión a la que asistirán representantes de los cinco partidos políticos y en la que tienen puestas sus "esperanzas" los familiares.
"Pese a los años de búsqueda infructuosa, de denuncias y causas archivadas estamos en el punto de partida. Nos escuchan, pero las palabras las han guardado en un cajón y ahí siguen", ha confesado en declaraciones a EFE Isabel Agüera, presidenta de ABEROA (Asociación de Bebés Robados de Andalucía).
Entre los afectados, cerca de un millar de familias en la comunidad, se dan casi todas las casuísticas. Hijos adoptivos que buscan a sus familias biológicas, padres que buscan a sus hijos y hermanos que buscan a sus hermanos, caso Isabel Agüera que emprendió en el 2009 la búsqueda de su hermana, se supone que muerta el nacer en 1970 en un hospital de Málaga sin documentación que lo certifique.
"Lo que queremos es conocer la verdad, justicia y ayuda para desmontar una trama en la que había y hay gente muy influyente de este país", ha explicado.
En el transcurso de la Jornada, los familiares de los niños y padres robados pedirán a los partidos un compromiso que facilite la búsqueda de los desaparecidos y medidas para el reencuentro entre padres, hijos y hermanos.
Entre sus reclamaciones, solicitan el acceso a las historias clínicas en los centros hospitalarios públicos y a los registros de los cementerios e instar al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) a la apertura de los archivos del Tribunal Tutelar de Menores.
Quieren también que se dé a los afectados el reconocimiento oficial de víctimas por el robo de hijos o hermanos y por las adopciones ilegales conforme a los principios de la ONU, así como crear una base de datos única de ADN para establecer las relaciones de parentesco.
Además, pretenden que los obispados de Almería, Granada, Córdoba, Sevilla, Málaga, Jaén, Cádiz y Huelva colaboren permitiendo la apertura de los registros de nacimientos, defunciones y adopciones.
La intención es, igualmente, garantizarse la colaboración de la Junta de Andalucía y la realización de una regulación legal tendente a resolver esta cuestión.
Está previsto que la jornada acuda María Garzón, hija del exjuez que se ha significado por el apoyo a la causa de los afectados y que identificó el robo de niños y las adopciones forzosas durante el franquismo como uno de los episodios "más crueles y oscuros" de la dictadura.
Tal y como ha reconocido la presidenta de la ABEROA, casi todas las asociaciones defiende el reconocimiento de las víctimas, si bien ha matizado que lo que les mueve no son las posibles indemnizaciones sino la "búsqueda de la verdad".
Las asociaciones calculan que los afectados en la comunidad son en torno a mil familias, unas 300.000 en España, que han promovido miles de denuncias, la mayoría de ellas archivadas
En concreto, el 80 por ciento de los casos en España ha sido archivados, el cien por cien en Andalucía, especialmente en las provincias de Cádiz y Huelva, las más activas que han visto sus casos archivados por estar prescritos.
"Estamos casi igual que cuando empezamos, pero estamos también cargados de esperanza, de ilusión por sacar de la Jornada compromisos que nos ayuden a encontrar a nuestros familiares desaparecidos y por llegar al fondo de trama", ha aseverado Isabel Agüera.
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