Rafael Hidalgo cumple su octava temporada como presidente de la Sociedad de Carreras de Caballos de Sanlúcar. Ha formado parte de la junta directiva de esta entidad hípica durante muchos años. Ha afrontado meses muy complicado por la difícil situación que ha padecido el turf nacional pero ha salvado la temporada veraniega de la Ciudad de la Manzanilla. Ya sí que puede respirar mucho más tranquilo.
Rafael, el 2015 ha sido bastante complicado para el turf nacional.
—Bastante por la regularización de las carreras porque desde diciembre del 2014 no se han celebrado. Lo que no hubiera tenido sentido es que en el 170 aniversario no se celebraran carreras en Sanlúcar. Lo dije en una reunión que hubo en Madrid, en la Asociación de Hipódromos a la que pertenecemos, que si no teníamos carreras en Sanlúcar me tenía que ir de mi pueblo.
Con tantos años de historia, ¿ha habido alguna suspensión?
—Sí. Por ejemplo, en la Guerra Civil y en la Guerra de Cuba pero por algo forzado.
¿Ha temido por la suspensión?
—Lo que temí fue que no hubiera un órgano regulador. Hubo una confrontación con la Sociedad de Fomento de la Cría Caballar, con lo que no hubieran venido caballos y las carreras de Sanlúcar no tendrían la categoría que se merece.
¿Qué hubiera supuesto?
—Una ruina para Sanlúcar y para nosotros por los compromisos con los patrocinadores y los convenios firmados. Ya digo, una catástrofe.
Se dijo en la presentación del cartel que había que apoyar más que nunca este evento. ¿Una verdad como un templo?
—La duda ha estado en que si iban a venir los caballos. Las cuadras tienen su caballos en el campo y si no hay carreras es difícil mantennerlos. Tampoco se puede pagar a los preparadores. Sé que habrá muchos caballos porque hay gente con muchas ganas de que haya carreras.
Me imagino que el apoyo de los patrocinadores habrá sido fundamental.
—Eso nos ha dado más confianza de cara al futuro. Los años malos de patrocinadores como que van de paso pero es algo que no haya pasado todavía.
Los jinetes y amazonas desean competir en Sanlúcar. ¿Qué le dice eso?
—Que nuestras carreras levantan muchas expectativas por ese entorno tan maravilloso, el hipódromo natural que le viene bien a muchos caballos. Los participantes se lo pasan bien, las familias enteras viene a veranear, el pueblo se vuelca porque los sanluqueños y las sanluqueñas recibimos muy bien a todo el mundo. Sanlúcar tiene mucho tirón.
¿Cómo valora que una revista tan importante y prestigiosa en el mundo como Gallop Magazine le dedique un espacio a las Carreras?
—Que es magnífico. ¿Cuánto vale eso?. Estamos hablando de un gran revista.
¿Qué se le viene a la mente en los días previos a las Carreras?
—Que en mis comienzos como presidente los nervios me comían. Ahora lo organizamos todo con tiempo, como por ejemplo el montaje. Yo estoy tranquilo, viendo las inscripciones, los caballos y esperando a que comience el espectáculo y por supuesto que todo salga perfectamente.
Me imagino que días de bastante ajetreo.
—Tu lo estás viendo. Y va en aumento a medida que se acerca el comienzo de esta edición. Hay compra de entradas anticipada, la solicitud de acreditaciones, las inscripciones..., es que no se para.
Que le dicen 170 años de histoira
—Que tenemos mucha responsabilidad cada vez que miramos hacia atrás. Cuando hablamos de tantos años muchos se echan las manos a la cabeza porque empezaron nuestros antepasados y hasta hoy estamos.
Rafael, para acabar, algo más que añadir o algún llamamiento.
—Sé que mucha gente repite y viene a Sanlúcar para ver este espectáculo porque se engancha. Le digo a todo el mundo a que venga a ver las carreras, a que la conozcan y la disfruten. Que se encuentren a gusto en nuestra ciudad, que conozcan nuestra Manzanilla y nuestra gastronomía. Estamos hablando del evento turístico más importante que tiene Sanlúcar de Barrameda. Las Carreras de Caballos, además de ser un espectáculo, son una gran inyección de dinero para la ciudad.
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