Al menos 26 niños fueron asesinados, algunos de solo 7 años, y otros tantos llevados por la fuerza y reclutados en ataques perpetrados por grupos armados en Sudán del Sur las últimas dos semanas, según testimonios divulgados el lunes por Unicef en un comunicado.
Niños fueron víctimas y también perpetraron actos de violencia recientes en el estado de Unidad, en los que hombres y niños armados, vestidos de militares o civiles, fueron responsables de la destrucción masiva de vidas y propiedades, de acuerdo con decenas de testimonios de personas que han huido de las aldeas en llamas, añadió el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Los supervivientes dijeron a personal de Unicef que aldeas enteras han sido quemadas y reducidas a cenizas por grupos armados, mientras que un gran número de niñas y mujeres han sido violadas y asesinadas públicamente -incluyendo algunas de apenas 7 años-.
Al menos 19 niños, algunos de solo de 10 años, y siete niñas han sido asesinados, y otros han sido mutilados o reclutados para unirse al combate y cuidar el ganado robado, según las declaraciones divulgadas por Unicef.
El representante de esa agencia de la ONU en Sudán del Sur, Jonathan Veitch, citado por Unicef, dijo que los testimonios de varios testigos muestran una "fotografía terrorífica" de la situación que están sufriendo estos niños y niñas mientras se intensifican los combates días antes del comienzo de la temporada de lluvias.
"Que los niños sean el objetivo deliberado de estos ataques es una barbaridad", añadió Veitch.
El delegado de Unicef consideró una "necesidad urgente" para proteger a los niños de un daño mayor el cese inmediato de las hostilidades y el pleno acceso de los trabajadores humanitarios.
También pidió una investigación urgente y exhaustiva para identificar y pedir cuentas a los responsables de estas últimas atrocidades cometidas contra los niños.
El Gobierno de Sudán del Sur y las fuerzas de oposición al Gobierno deben utilizar toda su influencia para proteger a los niños y detener de inmediato las graves violaciones contra la infancia, incluida la violencia sexual, así como incidir para liberar a todos los niños de las fuerzas armadas y los grupos asociados, agregó Unicef.
Se calcula que unos 13.000 niños han sido reclutados o utilizados por todas las partes en conflicto, según datos verificados por Naciones Unidas citados por esa agencia.
La mayoría de las personas que sobrevivieron a los recientes ataques en Sudán del Sur son mujeres y niños pequeños.
Las últimas semanas, los combates han ido en aumento en los estados de Unidad y Alto Nilo, provocando violaciones contra los derechos de la infancia con una regularidad alarmante, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia.
Esa agencia considera fundamental que se permita a Naciones Unidas el acceso sin restricciones a las zonas afectadas por la violencia reciente en ambos estados a fin de brindar apoyo y protección a las mujeres, los niños y a todos los civiles que pueden estar heridos, atrapados o escondidos.
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