Unas privilegiadas vistas de la ciudad, desde el cielo. Es lo que ofrece desde este martes la Catedral de Málaga que ha abierto al público las visitas a las bóvedas de su cubierta. Eso sí para alcanzar estos 50 metros de altura que permiten divisar la arquitectura y principales monumentos malagueños el visitante deberá subir más de 200 escalones.
La visita, con guía, contempla un recorrido a través de la escalera de la torre norte, del siglo XVIII, las terrazas intermedias de las capillas y la escalera de uno de los cubillos del siglo XVI. Se podrá realizar en grupos de 50 personas de martes a domingo de diez y media a dos y media de la tarde. Además, a partir del 29 de mayo y solo los viernes también será posible disfrutar de este paisaje de noche.
Las entradas, que pueden adquirirse en el Palacio Episcopal, en la Plaza del Obispo, cuestan seis euros, precio reducido de tres para jubilados, parados, estudiantes y grupos concertados. Y hasta finales de agosto, los malagueños podrán subir al particular cielo de la Catedral por solo un euro.
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