Sevilla Este y Alcosa podrán disfrutar a principios de otoño de la restauración ambiental completa del arroyo Ranillas, lo que permitirá eliminar el muro físico que desde siempre ha separado a ambas barriadas, una actuación que contempla el acondicionamiento de las riberas, con carriles bici y una alameda peatonal, de varias zonas de esparcimiento, y mejoras en los pasos peatonales, uno de ellos entre La Doctora y Palmete, todas demandas vecinales de hace treinta años.
El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, junto a varios representantes de entidades vecinales de la zona, recibió ayer información de primera mano sobre las actuaciones por parte del presidente de la Confederación Hidrográfica del Gudalquivir (CHG), Manuel Romero, cuya entidad aporta el 80% de los fondos (Feder), mientras el Ayuntamiento aporta el 20% restante hasta los 4,3 millones totales.
Según apuntó ayer el alcalde, las obras, que han sufrido algunos retrasos para mejorar en el proyecto los aspectos de seguridad, comenzaron en septiembre pasado y se prevé que estén listas a finales de septiembre, mientras está ya ejecutado el 20% (carriles bici, pasos peatonales y cerramientos).
Vertebración y seguridad
Zoido ha destacado la necesidad de estas obras para que la “vertebración” de Alcosa con Sevilla Este fuera una “realidad”, además de que se “eliminara el riesgo que había y que se integrara la zona con una serie de parques”.
“Esto ha sido posible gracias a la colaboración entre las Administraciones, con compromiso, un proyecto compartido con los vecinos que termina con una demanda de 30 años”, recalca.
“Estamos ganando una oportunidad importante de aprovechamiento y de integración”, insiste, tras recordar que existía un proyecto antiguo “que se mejoró y se reforzó en sus condiciones de seguridad”.
Para Zoido, supone una gran satisfacción cumplir uno de sus compromisos electorales y dotar a la zona de “un espacio verde, sostenible y de convivencia”.
La CHG y los vecinos
Por su parte, Manuel Romero se ha mostrado “satisfecho” con el transcurso de las obras realizadas a petición del alcalde y que suponen el “remate del convenio de restauración que se realiza en la capital desde hace más de diez años”.
“Esta zona la vamos a poner en valor para los vecinos, con un maravilloso paseo peatonal, una zona de bicis, y todo ello mejorando la seguridad con las vallas”, destaca poniendo en valor el “buen ritmo” de las obras.
En este marco, Ricardo Molinero, representante de la Agrupación de Intercomunidades de Alcosa, ha detallado también parte del proyecto, destacando las pasarelas que unirán ambas zonas “sin el peligro de hundimiento”. “Va a ser una cosa magnífica y maravillosa, como nunca hemos tenido”, ha resaltado.
Las actuaciones
El proyecto contempla el acondicionamiento ambiental de las riberas del arroyo Ranillas en un tramo de 2.320 metros entre la calle Taiwán y la pasarela que cruza el encauzamiento, a la altura del parque Infanta Elena, así como el de las zonas situadas al Norte y al Oeste de este parque. También contempla implantar una alameda peatonal paralela al arroyo que comunique el parque del Tamarguillo con el parque Infanta Elena, creando un corredor verde longitudinal.
En esa alameda se integrará un carril bici de 2,5 kilómetros, ampliando la red actual y que vertebre longitudinalmente este sector de la ciudad, que se unirá también con el del Parque del Tamarguillo.
Además, se va a reforzar la estructura que actualmente cubre el canal y que está siendo utilizada por los ciudadanos como zona de tránsito, instalando dos pasos peatonales y dos plazoletas sobre el encauzamiento del arroyo.
Equipamientos deportivos
Junto al Parque Infanta Elena, según ha detallado el Ayuntamiento, se van a habilitar parcelas destinadas a equipamientos deportivos y otras para huertos familiares, además de potenciar la vegetación con la mejora de las especies ya existentes y la plantación de nuevos árboles.
También se va a adecuar el arroyo Ranillas en la zona de los barrios de La Doctora y Palmete, mediante la limpieza manual del tramo y la ejecución de una nueva estructura, también sobre el encauzamiento del arroyo, que servirá de paso peatonal para permeabilizar la movilidad entre ambas barriadas.
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