La Corporación municipal celebró una de sus últimas sesiones plenarias del presente mandato. A menos de dos meses para las elecciones municipales se abordó nuevamente la privatización del servicio de recogida de basuras y la gestión de los principales parques y jardines de la ciudad, aunque, no obstante, el único punto del orden del día consistía en dar cuenta de la resolución emitida por la Junta de Andalucía que da luz verde al expediente administrativo para la concesión del servicio y que deja sin efectos las alegaciones presentadas por la empresa Urbaser. En este sentido, es el Pleno el que actúa como órgano contratante.
Después de que el expediente haya permanecido diez meses en la Junta, será la UTE Fomento Alternia la que gestionará estos servicios.
Si bien el pleno se había concebido como un mero trámite administrativo, fue el propio secretario de la Corporación el que admitió que se podía votar el conocimiento de la resolución y por tanto generar debate, lo cual, sin duda, aprovecharon los distintos grupos.
A partir de ahí, el grupo socialista se centró en una serie de argumentos económicos para rechazar la privatización del servicio, tales como se incrementaría en más de un millón de euros para las arcas públicas, pero sobre todo que ahora no es el momento adecuado ante la situación económica municipal. Su portavoz, Isidoro Gambín, volvió a referirse a las deudas del Ayuntamiento y pidió responsabilidad al ejecutivo, para cuestionarse por qué poner el servicio en manos de una empresa que se llevará un seis por ciento de beneficio industrial. En base a un informe de Intervención, dijo que el servicio costará más de 100.000 euros mensuales respecto al gasto actual y que además el Ayuntamiento tendrá que seguir soportando la carga laboral de los actuales operarios de parques y jardines. En suma, Gambín dijo que la privatización “abre las puertas” a un posible encarecimiento del recibo de la basura para los ciudadanos.
Desde el grupo Ai-Pro, su portavoz, Manuel Erdozain, justificó la privatización con la necesidad que tenía el servicio de basuras de una renovación tanto de la flota de camiones como de contenedores, para admitir en este sentido que el actual servicio deja mucho que desear. Dijo no entender porqué el expediente de la concesión ha permanecido paralizado diez meses en la Junta y que “no hay ocultismo” en este asunto. Aprovechó para criticar la gestión de los socialistas durante ocho años al no haber mejorado el servicio de basuras y sobre todo de haber “abandonado” a su suerte la empresa mixta Ecorreciclajes con una deuda de un millón y medio de euros en Seguridad Social, IRPF y otros conceptos. En resumen, Ai-Pro defiende que “Arcos tendrá el servicio que se merece” y rechazó que la privatización del mismo vaya a encarecer la factura ciudadana.
A estas alturas del pleno tomó la palabra el alcalde-presidente, José Luis Núñez, para recordar que “las grandes ciudades” han puesto este servicio en manos de empresas privadas buscando la eficiencia y la mejor gestión de cara al ciudadano.
Desde el grupo PP, su portavoz, Sebastián Ruiz, se mostró muy “gráfico” al señalar que “lo que es una vergüenza es que el ciudadano pague sus impuestos a cambio de un mal servicio”, para admitir el grave problema con la flota de transporte, la cantidad de contenedores rotos y otras manifiestas deficiencias que registra actualmente la recogida de los residuos sólidos urbanos. A este respecto, aseguró que es responsabilidad del Ayuntamiento ofrecer el mejor servicio posible. Ruiz también desmontó los números de la oposición para afirmar que el servicio actual no cuesta 1,4 millones al año, sino bastante más, ya que esa cantidad es prácticamente para pagar la nómina de los trabajadores, con lo que quiso explicar que la subida a la que apunta el PSOE no es tal.
Durante su escueta intervención, el portavoz del grupo Ven-T, Antonio Ortiz, se lamentó que durante los cuatro años del mandato haya habido recursos para un campo de fútbol, una playa artificial y otros proyectos y no para solucionar el grave problema de la ciudad con el deficitario servicio de recogida de basuras, y acusó al equipo de Gobierno de “vender” el agua y la recogida de basuras, e incluso, irónicamente, de “vender Santa María si pudiera”.
Los turnos de réplica abrieron un intenso y agrio debate sobre la situación financiera municipal, y lo más llamativo fue la enmienda presentada por el PSOE para que la privatización del servicio se pospusiera para después de las elecciones municipales, al objeto de que sean los ciudadanos a través de su voto los que elijan qué modelo de gestión de la basura quieren para el municipio. En cualquier caso, la propuesta quedó rechazada posteriormente con los votos en contra del equipo de Gobierno PP-Ai-Pro. No así el punto , que fue finalmente votado a favor por el ejecutivo y rechazado por la oposición. En resumen, la privatización del servicio es ya un hecho después de aprobarse la continuidad del expediente tras la resolución de la Junta.
El pleno acabó como “El rosario de la aurora”, con un áspero debate sobre la gestión de los dos últimos equipos de Gobierno, con los mismos argumentos que han expuesto en el salón de plenos en infinidad de ocasiones. Destacó la asistencia del concejal socialista Joaquín Macías al encontrase de vacaciones de su trabajo particular, lo cual despertó la extrañeza y las críticas del ejecutivo.
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