Llegó el fin de una Semana Santa muy esperada, porque ha sido la primera, desde el año 2006, en la que todas las hermandades y cofradías han podido realizar sus procesiones de penitencia. El balance ha sido más que positivo con una ciudad apasionada por las procesiones, y por qué no decirlo, por los veladores y por la hostelería, que ha visto como para este sector también ha sido una Semana Santa de diez, tal y como apunta el presidente de la Agrupación de Cofradías, Francisco Latorre. Terminó el breve asueto político tras el vendaval de las Autonómicas y casi sin tiempo para reflexionar, los partidos deben volcarse ahora en las Municipales, a la vuelta de la esquina ya. Comienza por tanto la otra pasión, la política, la del nuevo tablero estrenado en las pasadas elecciones a la Junta de Andalucía, con el revés sufrido por el Partido Popular en la capital y en la provincia, el batacazo de IU y la caída amortiguada del PSOE. Todo hace indicar que estas van a ser unas elecciones anticipadas en lo que a pactos se refiere. Es decir, aunque los partidos echen el resto en sus campañas, nunca antes se ha mirado tanto de reojo al voto que pueden conseguir formaciones como Ciudadanos, la coalición Ganemos y UPyD. La conjunción y conjugación postrera de sus votos pueden dar sorpresas a un PP, desgastado, reacio a la autocrítica y con pocas bazas para sorprender en sus listas.
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