40 días han necesitado los gestores de la Casa Invisible para conseguir los 20.000 euros que pedían a los usuarios y simpatizantes con la filosofía de este inmueble ‘okupa’ para rehabilitarlo.
A base de aportaciones, de donaciones individuales, de mayor y menor cuantía, los ocupantes de la Casa Invisible han logrado el objetivo que se habían propuesto: recaudar 20.000 euros para rehabilitar un inmueble que fue clausurado el pasado 23 de diciembre por el Ayuntamiento. La administración local argumentó su decisión en el estado que presentaba el edificio que calificó como inseguro para la realización de actividades de libre concurrencia.
Este dinero permitirá acometer la primera fase de los trabajos de recuperación de esta casa que continúa abierta pero tan sólo para las reuniones internas de sus promotores, por razones de seguridad.
Más de 500 personas ha participado en esta campaña de financiación colectiva, en la que la Casa Invisible ha contado con el apoyo de iniciativas como Ateneo Candela, Patio Maravillas o La Villana de Vallekas.
La Fundación de Los Comunes, actuales gestores del inmueble, están pendientes de una nueva reunión con los servicios públicos de la ciudad. Actualmente, la ocupación de este edificio municipal, situado en los número 9 y 10 de calle Nosquera, es irregular y, para formalizarla, el Ayuntamiento evalúa la posibilidad de convocar un concurso público o, bien, cederla directamente a los actuales gestores.
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