Estudiantes volvió a aprobar el examen del Palacio de Deportes y superó a un UCAM Murcia, por 90-79, que le sirve para sumar su sexta victoria consecutiva en casa, igualar a su rival en a clasificación y seguir mirando hacia arriba en la clasificación.
Estudiantes comenzó bien, centrado, con ganas de aumentar a seis los triunfos consecutivos en su feudo del Palacio de Deportes, 10-2 (min. 3,30), todo lo contrario que un UCAM Murcia dormido, sin mordiente, desubicado.
Mientras los colegiales mantuvieron una estructura de juego lógica en pista, es decir y fundamentalmente con un 'cinco', Uros Slokar, el marcador se decantó hacia su lado.
Cuando el esloveno estaba en el banco, por cansancio sobre todo, el equipo murciano recuperó terreno, 17-17 (min.8,30) gracias al acierto en el tiro, de Nemanja Radovic y Scott Wood.
Estudiantes cerró el primer acto con una mínima victoria parcial de 22-21.
En el segundo cuarto se repitió la historia. Los locales pasaron por problemas en ataque, por falta de definición, y vieron el cielo abierto cuando Slokar volvió a la pista. El juego colegial volvió a tener un referente en la pintura, todos encontraron más espacio y el marcador volvió a dispararse, 37-27 (min. 15,30).
La ausencia de Slokar y el acierto de Radovic y Augusto Lima volvió a constreñir el marcador, 40-35 (min. 18,30), aunque esta vez los colegiales consiguieron minimizar un poco más los daños y marchar al descanso con cuatro puntos de ventaja, 43-39.
Los dos equipos menos reboteadores de la competición hicieron honor a esa clasificación con 12 para Estudiantes y 15 para los murcianos tras veinte minutos de juego.
Un nuevo tirón de los madrileños en la reanudación del juego, 54-45 (min.24) se vio contrarrestado con la tercera personal del 'center' esloveno, aunque el protagonismo ofensivo Nacho Martín, al que Sadiel Rojas nunca pudo frenar, permitió un recorrido por el partido sin tantos sobresaltos, 64-51 (min.28), para finalizar el tercer cuarto con un más claro 67-57.
Estudiantes tomó más aire en el marcador, 73-57 (min. 31,10), y lo que fue mejor para sus intereses: el UCAM Murcia no dio muestras de poder de reacción, más allá de un intento de defensa en zona presionante que no tuvo más consecuencias.
Los locales comenzaron a sentirse cómodos y con el examen prácticamente aprobado, el sexto consecutivo en casa, fueron en busca de nota, pero no pudieron con los 14 puntos (79-65) de diferencia que consiguió el equipo murciano en el partido de la primera vuelta.
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