Los atentados yihadistas del 8 de enero en París, no solo ocasionaron la activación en la provincia de Jaén, al igual que en el resto de España, del Nivel 3 del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista, por parte del Ministerio, lo que supone una mayor vigilancia por parte de las fuerzas de seguridad de los puntos sensibles, sino que además ha disparado el número de llamadas de ciudadanos que alertan sobre situaciones sospechosas. Llamadas que las fuerzas de seguridad del Estado tienen que comprobar, aunque hasta el momento no se hayan detectado ningún movimiento yihadista.
La provincia, y en concreto, la capital, no presenta problemas especiales en este sentido. Por lo que el portavoz de la Policía Nacional, Diego Moya, manda un mensaje de tranquilidad.
Pero el protocolo estipula, y así sucede que haya más agentes, tanto de uniforme como de paisano, en las calles y se presta una especial vigilancia a los puntos sensibles, como son las estaciones de tren o autobús, la universidad, las instalaciones eléctricas, depósitos de agua o lugares oficiales.
Además, en esta ocasión por el carácter de la amenaza se añaden todos los lugares de culto, especialmente la Catedral. También los agentes prestan una especial vigilancia a grupos, como a los que se sabe que vienen, de forma periódica, de otras ciudades recaudando dinero para la construcción de mezquitas en otros lugares de fuera de España.
Plan
Hay cuatro niveles en el Plan de Prevención Antiterrorista. Nivel 4 (riesgo de atentado inminente), Nivel 3 (riesgo altamente probable), Nivel 2 (riesgo probable de atentado) y Nivel 1 (riesgo potencial). También hay intensidad alta o baja.
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