La actriz peruana Jackelyn Vasquez se mostró muy satisfecha de su papel en la película "La hora azul", que hoy se presentó en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, y de la que dijo que preparar su personaje "fue un proceso muy duro".
La película narra la historia de Adrián Ormache, un exitoso abogado limeño que descubre un secreto oscuro del pasado, ya que su padre, un marino ya fallecido, destacado en Ayacucho durante los años ochenta del siglo XX, violaba y torturaba terroristas y pobladores de la zona.
Un día se enamoró de una prisionera y mantuvo una relación con ella hasta que esta se escapó, y Adrián se propone encontrar a este único testigo de las atrocidades cometidas por su padre para proteger su prestigio.
En conferencia de prensa en el Festival de Cine Iberoamericano, Vasquez reconoció que la película trata un tema muy duro, "sobre todo porque la violencia ha sido parte de la realidad" en su país, con una época en la que "se vivía todos los días, y adentrarse en una historia de alguien que ha podido vivirla es imposible -subrayó- que no te remueva emociones por dentro".
Según Vasquez, "La hora azul", opera prima de Evelyn Pegot-Ogier, intenta "contar que la violencia no desaparece, solo se duerme por un rato, y aparece con otro nombre y otra cara".
"La idea es no olvidar lo que ha pasado, y sobre todo tener en cuenta que parte de esa historia es parte de lo que ahora podemos ser en estos momentos", añadió.
La cinta cuenta entre sus principales papeles, además de con Vasquez, con Giovanni Ciccia y Rossana Fernandéz-Maldonado.
Su directora tiene estudios de cine en Lima y París, y ha trabajado varios años en la industria audiovisual francesa, para fundar en 2010 Panda Films y desde 2013 se dedica a la docencia universitaria.
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