El nadador Michael Phelps ha sido arrestado en Maryland (Estados Unidos) mientras conducía bajo los efectos del alcohol y a una velocidad superior a lo permitido, en un tramo de 70 km/h el atleta circulaba a 135 km/h.
La policía de la localidad ha sido la primera en confirmar estos hechos y el propio nadador se ha mostrado arrepentido y avergonzado en su cuenta de Twitter: "Entiendo la gravedad de los actos por los que fue arrestado y asumo toda la responsabilidad. Sé que ahora no significan mucho mis palabras, pero quiero pedir perdón a todos los que he decepcionado".
Pero esta no es la primera vez que Phelps se tiene que enfrentar a un cargo similar. En 2004 fue condenado por conducir borracho a 18 meses de vigilancia, y en 2009, unas imágenes suyas fumando marihuana dieron la vuelta al mundo.
Phelps se retiró de las competiciones en estos pasados juegos de Londres. Ahora prepara su vuelta a las piscinas olímpicas, manchadas eso sí, por este desagradable incidente.
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