Más de 14.000 alumnos comienzan este lunes el curso escolar entre Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato y los Ciclos Formativos en Jerez. De toda esta oferta, en el caso de Jerez el Bachillerato está en el punto de mira después de que el inicio de las clases se presente más caótico que nunca, a juzgar por la denuncia que han realizado padres afectados a este periódico y los propios alumnos por la incertidumbre que están viviendo al no conocer aún si tienen plaza y en qué centro estudiarán. Se calcula que más de 150, casi todos procedentes de centros concertados y privados, pueden estar en esta situación, aunque fuentes de Delegación territorial de Educación de la Junta han negado a este periódico que sean tantos.
En el caso de Manuel Martínez, padre de un alumno procedente de La Salle que está en esta situación, su peregrinaje por institutos de Jerez, como el de otras tantas familias, comenzó en junio. No hubo suerte. En todos los centros a los que acudían les dijeron lo mismo: “vuelvan en septiembre”, y ha llegado septiembre y las listas no han salido. “Mis otros dos hijos han estudiado en La Salle al igual que yo, pero la situación económica de ahora no es la de antes así que nos planteamos que el menor estudiara en un centro público pero nunca nos imaginamos que sería tan difícil”, explica.
Tras un aplazamiento, la fecha fijada es el próximo lunes, coincidiendo con el inicio del curso y cuando se abrirá también el periodo de matriculación. Pero los problemas no acaban aquí, porque una vez que los institutos publiquen sus plazas libres en la página web http://iesjosefa.es , desde la Comisión Territorial de Garantías de Admisión ya han informado que deberán personarse en los centros para matricularse “por orden de llegada”.
Un ‘Pekín express’ a la fuerza
“Esto como poco es precipitado porque se supone que cuando en la web se publiquen las plazas el primero que llegue la pilla, ¿que hay que irse a dormir al instituto en cuestión como si fuéramos a un concierto de los Rolling Stones?Esperaremos que salgan las listas, cogeré el coche, pondré la sirena y no pararé en ningún semáforo, como si fuéramos participantes de un Pekín-Express improvisado por la Delegación de Educación”, señala indignado.
De hecho, ni él ni otros padres no descartan la posibilidad de organizarse de alguna forma para reivindicar su derecho en la calle en función de lo que ocurra este lunes ante el temor de que sus hijos se queden sin plazas. Un extremo este que rechazan tajantemente desde la Delegación territorial de Educación, donde garantizan que todos los alumnos en esta situación tendrán plaza tras afirmar que hay vacantes suficientes. Eso sí, reiteran que sobre los estudiantes que han estado fuera del circuito de enseñanza pública en su etapa escolar hasta iniciar este ciclo tienen prioridad los que proceden de centros públicos y tienen su instituto asignado o los que están promocionándose y han tenido que examinarse en septiembre.
Las mismas fuentes justifican también el retraso en la cobertura de vacantes en la falta de tiempo, ya que, como matizan, entre evaluaciones, exámenes, reclamaciones y matriculación “septiembre no tiene más días”. El problema de fondo radica, según explican los afectados, en la eliminación progresiva de unidades de Bachillerato, si bien en otros como el IES Seritium se ha ampliado. Desde Educació, además, no descartan solicitar más líneas a Sevilla “si fuera necesario”. La suerte está echada.
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