La exministra de Fomento Magdalena Álvarez, que ha dimitido como vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), ha afirmado que "los imputados del PP no dimiten, y a mí me parece muy bien", y ha defendido su labor en el banco, con 12.700 millones en préstamos para España desde que fue imputada.
En una entrevista en Canal Sur Radio, Álvarez ha reiterado que su dimisión no tiene nada que ver con su imputación en el caso de los ERE, sino con los intentos del Gobierno para que le abrieran una investigación en el BEI, donde ha asegurado que están "satisfechos" con su trabajo.
"A mí no me echa el banco", ha subrayado Álvarez, que ha vinculado su decisión a la petición oficial que hizo el Gobierno el pasado viernes para que cesara en el cargo y ha dicho que ha querido evitar que España dé la imagen "tercermundista" que a su juicio se ofrece con esta pugna por su puesto en el BEI.
"En mi dimisión mando yo", ha señalado Álvarez, que ha asegurado que ha dejado el BEI tras las elecciones europeas para no interferir en ese proceso electoral y después de comprobar que el Gobierno es "la mano que mece la cuna" para que dejara su cargo.
Desde que fue imputada en julio de 2013, España ha sido el país que ha logrado más préstamos del BEI, con 12.700 millones de euros, cifra que supera la conseguida en toda la historia de la relación española con el banco, según Álvarez, que ha enfatizado que no ha discriminado a ninguna comunidad o persona por su ideología.
Por ello, ha defendido que "habría que haber sido un poquito más comedido a la hora de presionar para que otro se pusiera en mi sitio", y ha lamentado que en el PP "no tienen límites, y cuando quieren algo, van y lo cogen".
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