La tribuna de Viva Sevilla

Fin de la Escuela de Jardinería

Son miles las personas, de todo nivel y tipo de relación con la Escuela, que han mostrado su estupefacción e incredulidad por los padecimientos por los que pasa desde hace meses y que parece indicar que, para mal, pronto van a tener fin.

Si nada lo evita, el próximo día 30 de junio nos despiden. Esto ya nos ha sido comunicado por escrito y dejamos de trabajar en un puesto en el que hemos estado no sólo ganándonos la vida durante los últimos 14 años, sino también acopiando varios miles de corroboraciones, a razón de una por día, sobre lo acertado de nuestra decisión de dejar empleos anteriores para, por menos dinero y muchas más horas, dedicarnos a lo que hasta hoy nos ocupa.

En esto no se debe presumir la circunstancia de unos héroes o heroínas; bien al contrario, la de personas corrientes, aunque sí con una idea clara -bueno, más o menos- de lo que es aspirar a la felicidad.


Porque a la felicidad se aspira cuando una persona trabaja en lo que ama -también hay que aprender a amar en lo que se trabaja- y hacerlo en la Escuela de Jardinería “Joaquín Romero Murube” de la Fundación Forja XXI ha sido un privilegio, ganado día a día a pulso, y que parece tener los días contados.


Así es. En el año 2000 se inauguraba la Escuela de Jardinería de Sevilla, única en Andalucía y referente regional y nacional en formación en el ámbito de la Jardinería y el Paisajismo en sentido amplio. Entre todos -profesorado, alumnado, instituciones, empresas, familias…- hemos conseguido poner en el mapa a Andalucía y a la ciudad que nos acoge en lugar tan encantador como encantado, el Parque de María Luisa, en lo relativo a un campo de milenaria tradición, pero reiterativamente desatendido.


Se van a completar con la de este año 13 promociones de titulados y tituladas en estudios de formación profesional reglada de grados medio y superior; pero también se han impartido decenas de cursos de formación  ocupacional,  continua (para Servicios de Parques y Jardines), universitaria y tanto para técnicos especialistas y profesionales como para aficionados.
Hemos mantenido y mejorado durante muchos años los jardines delanteros del Parlamento Andaluz en la Macarena y el Patio de los Naranjos y otros en la Catedral y el Palacio Arzobispal.

Se han producido miles de plantas para la Diputación; se ha participado en decenas de foros profesionales y técnicos en Jardinería y en Arboricultura al más alto nivel nacional y europeo. Las empresas han reconocido la calidad de la formación de centenares de nuestros alumnos y alumnas: el grado de inserción en el mercado laboral ha sido sobresaliente (más del 70% de promedio).

Hemos formado una familia amante de los jardines, pero sobre todo de las ciudades sostenibles, de la dignidad humana y de los lugares que habita la gente, del entusiasmo por ayudarse a encontrar el camino que la pequeña historia nos tiene guardada y por ayudar a los demás como contribución  a la gran Historia.


Con todo, son miles las personas, de todo nivel y tipo de relación con la Escuela, que han mostrado su estupefacción e incredulidad por los padecimientos por los que pasa desde hace meses y que parece indicar que, para mal, pronto van a tener fin.


La Fundación Forja XXI, notable entidad que ha merecido tener una glorieta en Su Eminencia a su nombre, gozó de una época de gran actividad e influencia. Hoy sólo quedan 3 personas en su oficina central y los 9 que trabajamos en la Escuela de Jardinería, por poco tiempo ya.

Una muy equivocada estrategia de proyectos sin respaldo económico por parte de las instituciones que hasta entonces habían posibilitado las aventuras de la Fundación, los retrasos en los desembolsos de partes residuales de proyectos ya ejecutados desde años atrás, una muy tardía reacción y una falta absoluta de verdadera  planificación económica la han llevado a la ruina. Ruina que ha arrastrado a la Escuela, siendo ésta un proyecto absolutamente solvente.


Un gran desesperación nos embarga (nos deben siete meses y medio de sueldo) y una gran tristeza no nos deja dormir (nuestro sueño de Escuela se acaba). ¿Los patronos de la Fundación saben todo lo que hemos ahora de recomponer?
Esto lo firma con el corazón el director de la Escuela en nombre de todos.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN