El portavoz parlamentario de IULV-CA, José Antonio Castro, ha mostrado este miércoles su deseo de que "nadie vete" la solicitud de su grupo de realizar el voto a viva voz sobre la Proposición No de Ley (PNL) que insta a la Junta a que plantee al Gobierno central que establezca y ponga en marcha las disposiciones necesarias para que se realice, en el ámbito del estado español, un referéndum sobre la forma política del Estado, esto es, monarquía o república.
En rueda de prensa, Castro ha señalado que con esta petición quieren que se refleje "la honestidad, entre lo que se dice y se hace" y que los ciudadanos puedan identificar el voto de cada diputado en esta cuestión al tener que expresar cada diputado su voto de viva voz.
Ha indicado que el trabajo es "levantarse y decir sí, no o abstención" y "si es vetado, suponemos que será por algún interés". "Igual que nosotros tenemos interés legítimo en que se conozca el voto de cada diputado, el que lo vete tendrá un interés también legítimo de que no se conozca", ha subrayado.
Castro ha explicado que la mesa del Parlamento decidirá al respecto, aunque desconoce si algún grupo ha registrado un escrito en sentido contrario.
Cabe recordar que la Junta de Portavoces del Parlamento aceptó el miércoles pasado la inclusión de esta iniciativa en el orden del día, para lo que, en virtud del artículo 171 del Reglamento de la Cámara, necesitaba de la unanimidad de los grupos al tratarse de un asunto que afecta al ámbito nacional.
Izquierda Unida también plantea en su iniciativa que el Parlamento manifieste su posición favorable a la apertura de un proceso constituyente, que permita, con la máxima participación social, dar paso a una nueva Constitución española adaptada a la realidad actual y capaz de dar respuesta a las necesidades e inquietudes de la sociedad.
En la exposición de motivos de la iniciativa, IULV-CA recoge que tampoco hoy, como corresponde en una democracia moderna, la monarquía desempeña un papel de arbitraje o equilibrio y su papel en política exterior es meramente testimonial o cosmético, sino que, por el contrario, "están en la mente de todos algunas actuaciones lamentables que han supuesto y suponen un auténtico problema, y que están lógicamente en la base del desprestigio de que hoy sufre entre los españoles la institución monárquica".
Asimismo, pone de manifiesto que otra cuestión importante a considerar, especialmente en estos tiempos de crisis, es el coste de la propia institución monárquica, algo "difícil de conocer con exactitud pues, hasta la fecha, la opacidad ha presidido el conocimiento de las cuentas reales".
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