El abogado que denunció al juez de Familia de Sevilla Francisco Serrano por prevaricación ha presentado ahora una querella criminal contra la fiscal jefe sevillana, María José Segarra, por presuntamente no perseguir los delitos que cometieron asociaciones de apoyo al magistrado.
En su querella, a la que ha tenido acceso Efe, el abogado Íñigo Moreno Lara imputa a Segarra no haber actuado contra las asociaciones que, los días 27 a 29 de junio de 2011, se concentraron frente a la sede de los juzgados de Sevilla en contra del procesamiento del juez Serrano.
La querella se ha presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que ha informado a Efe de que el escrito se ha remitido a la Fiscalía antes de decidir sobre su admisión a trámite.
El juez de Familia sevillano ejerce en la actualidad la abogacía, tras ser condenado en el año 2012 por el Tribunal Supremo a diez años de inhabilitación por cambiar el régimen de visitas de un niño para que pudiese salir en una procesión de Semana Santa.
El abogado que denunció a Serrano dice que durante el juicio contra el juez en la sede granadina del TSJA, en octubre de 2011, las asociaciones que lo apoyan volvieron a manifestarse y protagonizaron desórdenes públicos "dentro y fuera de la sede judicial, sin duda animados por la inmunidad con la que habían actuado durante tres días en Sevilla".
Cuando se conoció la sentencia, las asociaciones volvieron a manifestarse y Segarra "volvió a omitir su obligación de perseguir delitos", afirma la querella.
Según Moreno Lara, "la notoriedad, continuidad y gravedad de los hechos impiden considerar la inactividad de María José Segarra como una simple falta de celo profesional" sino que "quiso voluntariamente y a sabiendas no perseguir a quienes se manifestaban a favor de un penado sometido a juicio y en beligerante ataque contra las instituciones de justicia".
Moreno Lara imputa además a Segarra no haber pedido el ingreso en prisión de Antonio R.D., miembro activo de una de las asociaciones que apoyan a Serrano, para cumplir una condena de 21 meses de prisión por maltrato de género contra su esposa, defendida por el abogado querellante.
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