Chaves y el equipo económico del Gobierno andaluz mantuvieron ayer una reunión con la cúpula de los sindicatos en la abordaron las medidas contra las crisis y los presupuestos de la Junta de 2009. Los dos sindicatos avalaron tanto la medidas anticrisis como las líneas generales de las próximas cuentas andaluzas, en lo que Chaves denominó como un “alto grado” de coincidencias.
“La crisis no puede dañar a lo público porque es la garantía de las políticas de igualdad y de protección”, aseveró en rueda de prensa el presidente, que se comprometió con los sindicatos a mantener estas políticas durante la crisis, así como a dar prioridad a las medidas contra el desempleo y la protección social de los parados.
Chaves señaló como conclusión “más importante” de la reunión la importancia del diálogo social en Andalucía y propuso iniciar lo antes posible el debate sobre del próximo Acuerdo de Concertación Social, que “debe tener en cuenta la crisis no para resignarse, sino para superarla”, puntualizó.
La reunión se centró en la lucha contra el paro, un aspecto en el que Chaves adquirió el compromiso de estudiar medidas para afrontar esta situación para cuando los parados dejen de percibir las prestaciones por desempleo.
Igualmente, se refirió a medidas que faciliten la movilidad entre los trabajadores sin empleo y al mantenimiento del tejido productivo andaluz con ayudas a empresas viables con dificultades por la crisis, aunque desde la “garantía de que los incentivos estén vinculados al mantenimiento del empleo”.
Durante el encuentro, Chaves y los sindicatos coincidieron también en hacer un llamamiento para que las cajas de ahorros asuman responsabilidades y normalicen los créditos para las pequeñas y medianas empresas (pymes) y familias.
Por último, afirmó que se puso en valor el desarrollo del Plan de Infraestructuras para la Sostenibilidad del Transporte en Andalucía (Pista), el Plan Concertado de Vivienda y Suelo y la partida dentro de los Presupuestos para las corporaciones locales.
Mantener el gasto social
Por su parte, el secretario general de UGT-A, Manuel Pastrana, calificó de “muy positiva” la reunión, ya que “se ha trasladado directamente a la Junta las inquietudes, preocupaciones y problemas de los trabajadores andaluces”.
Señaló que los “Presupuestos de 2009 van a permitir afrontar la crisis con una perspectiva de futuro diferente para remontarla en el menor tiempo posible”. Destacó como “importante” que el 70% del Presupuesto se dedique a gasto social, lo que es, según precisó, “un acierto en el momento en el cual la crisis afecta a cientos de miles de andaluces”.
De igual manera, tras señalar que la Junta por sí sola no puede resolver la crisis, indicó que el Presupuesto de 2009 es un instrumento “importante” para incentivar la iniciativa privada y para la creación de empleo.
Por su parte, el secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, valoró el “esfuerzo” del Presupuesto por “mantener las constantes vitales como son el gasto social y las inversiones productivas”, así como la movilización del ahorro acumulado en gasto social e inversión pública.
Entre las carencias, Carbonero puntualizó la necesidad de tener más inversión en Educación, ya que “si se quiere que Andalucía crezca en otra dirección y generar una economía con mayor valor añadido se necesita una inversión suficiente en el conocimiento que posibilite la salida de la crisis en otra dirección”.
De igual manera, pidió agilidad en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y extremar la protección de los desempleados, “en especial, -señaló- en la externalización de la Administración para que este empleo sea de calidad”.
El SOC denuncia el apoyo al sector financiero con una nueva ocupación
La Policía Nacional desalojó ayer por la tarde al centenar de jornaleros que, convocados por el Sindicato Andaluz de Trabajadores -antiguo SOC-, ocuparon por la mañana una sede del Banco Santander en la céntrica Puerta de Jerez de Sevilla, sin que hubiera incidentes, pues los ocupantes decidieron salir por su pie.
Tras casi diez horas de protesta, una treintena de agentes de la Unidad de Intervención Policial, que hasta entonces sólo mantuvieron labores de vigilancia, intervinieron para desalojar a estos trabajadores del campo, sólo después de que la propiedad del edificio presentara una denuncia por la ocupación.
Una vez recibida la orden, y tras entrar los “antidisturbios”, los jornaleros decidieron no oponer resistencia ni enfrentarse a la Policía y, sobre las 20 horas, salieron lentamente por su propio pie y fueron desalojando uno a uno el edificio, en medio de los aplausos y las consignas de otros 150 manifestantes que estuvieron todo el día concentrados a las puertas del banco.
Los jornaleros, encabezados por los dirigentes del SAT Diego Cañamero y Juan Manuel Sánchez Gordillo, entraron sobre las 10.30 horas en el edificio del Banco de Santander en la sevillana Puerta de Jerez, para denunciar el plan de apoyo del Gobierno al sector financiero y exigir la expropiación de los bancos. Según explicó Cañamero, el SAT exige la nacionalización de la banca y de las fábricas en crisis, que se lleve a cabo una reforma agraria y se cree un fondo de 2.000 millones para que los parados que se queden sin protección social puedan trabajar al menos 4 meses al año, en obras de interés social y a través de los ayuntamientos.
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