El Ayuntamiento de Sevilla acogió ayer una capilla ardiente con el cadáver del policía local de 27 años de edad fallecido en horas de servicio, a cuenta del accidente de tráfico en el que se vio involucrado la noche de este pasado lunes cuando circulaba con su motocicleta en la confluencia de la avenida de María Auxiliadora y la calle José Laguillo. El alcalde hispalense, Juan Ignacio Zoido, recibió en la Casa Consistorial a la familia del agente fallecido, a la que trasladó sus condolencias.
A la llegada del féretro asistieron, además, el delegado de Seguridad y Movilidad, Juan Bueno, así como otros miembros de la Corporación municipal hispalense y una nutrida representación de la Policía Local, con especial presencia de miembros de la unidad de motoristas, a la que pertenecía el agente Sergio Rodríguez.
Y es que los agentes del Cuerpo de Policía Local de Sevilla han encajado como un verdadero “mazazo” la muerte de su joven compañero, según explicó ayer Manuel Bustelo, presidente de la sección hispalense del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme).
Así, Bustelo indicó que “todos los días los agentes salen a patrullar sabiendo que nunca se sabe qué es lo que puede suceder”, la muerte de este joven policía “ha sido un mazazo” para el conjunto de miembros de la Policía Local, señalando además los momentos especialmente duros vividos por los agentes encargados de atender el accidente de su propio compañero.
De otro lado, los portavoces del PSOE e IU de Sevilla, Juan Espadas y Antonio Rodrigo Torrijos, respectivamente, lamentaron el fallecimiento del policía y trasladaron su pésame a la familia.
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