El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha señalado que tiene la "conciencia tranquila" a nivel personal en el caso de las supuestas facturas falsas pero está dispuesto a dimitir si se convierte en una "carga" para la organización.
"La dimisión es uno de los escenarios que me he planteado", ha admitido en declaraciones a LaSexta recogidas por Europa Press, aunque ha matizado que para dejar el cargo "tiene que haber un motivo que lo justifique" y por ahora, según ha dicho, ese momento "aún no ha llegado" porque las acusaciones contra él o contra el sindicato "carecen de fundamento".
En este sentido, el líder sindical ha recalcado que "una cosa son las informaciones que publican los medios" y otra distinta es "la realidad" y, en esta línea, ha negado que UGT se haya financiado a través de cursos de formación para trabajadores.
"No estoy en el detalle de todo, pero estoy en el detalle de lo suficiente", ha explicado Cándido Méndez, que ha señalado que ha barajado la posibilidad de dimitir al ver que "se multiplican" las noticias sobre este asunto en los medios de comunicación.
"Tengo la conciencia tranquila a nivel personal, pero lo veo con gran preocupación en relación con los afiliados. Si soy una carga para mi organización, tendré que contemplar la dimisión", ha subrayado al respecto.
En relación al Instituto de Formación y Estudios Sociales (IFES), propiedad de UGT y encargado de dar formación a trabajadores y parados, Cándido Méndez ha admitido que el sindicato tiene deudas con el centro porque el 75 por ciento de los cursos que gestiona el mismo parten de las Comunidades Autónomas, que abonan parte del importe de los cursos tiempo después y al final lo justifican. La correlación, ha matizado en cualquier caso, "es absolutamente falsa".
El líder de UGT ha defendido que el sindicato es transparente y ha recordado que incluso le gustaría que la Ley de Transparencia que se aprobará este semana fuera "más exigente". "Lo que no queríamos es que incorporara una serie de elementos que pudieran perjudicar nuestra acción sindical, como el papel del sindicato en la negociación colectiva", ha precisado al respecto.
Sobre el caso de los ERE de Andalucía, Cándido Méndez ha enfatizado que el secretario general de UGT en Cádiz, Salvador Mera, es el único miembro del sindicato imputado en el caso y ha hecho hincapié en que ya presentó su dimisión. Ha descartado presentar querellas contra los medios porque, según ha dicho, la "experiencia" en anteriores ocasiones "es muy poco positiva".
Finalmente, ha indicado que, aunque tiene la percepción de que la sociedad valora positivamente el trabajo del sindicato, UGT sigue trabajando para "mejorar esa percepción". "Tenemos un papel insustituible y ese papel está en la empresa. Aunque en las mareas están presentes también los sindicatos", ha concluido.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es