Es posible que, y al estar tan cerca de este enclave, muchas veces no seamos conscientes de la importancia y riqueza que posee el Parque Metropolitano de Los Toruños. Pero, de hecho, sí que la tiene, y así lo avalan las visitas de las personas que vienen desde distintos puntos de nuestra geografía nacional.
La flora y la fauna conviven en este particular espacio que, dadas sus características medioambientales y de situación, propicia la crianza de distintas especies, al tiempo que es una parada obligatoria en la migración de diferentes especies. “Es conocido que el parque natural Bahía de Cádiz es un enclave importante sobre todo para las aves limícolas porque, especialmente en estas fechas, de octubre a diciembre, es una época de invernada y es una etapa crucial para la supervivencia de las aves en las rutas migratorias porque aquí paran y es cuando toman las reservas para seguir con su migración”, ha explicado Eloísa Ramos, técnico de Medio Ambiente del parque de Los Toruños.
Un entorno, el de esta marisma, que quizá no aporte demasiada belleza a quienes se acerquen hasta aquí, pero, de hecho, tiene otro tipo de particularidades. “Parece que, al ser zonas degradas y pobres carecen de utilidad, y nada más lejos de la realidad, ya que aportan al entorno muchos aprovechamientos”, ha señalado Ramos.
Y, de hecho, éste puede que sea el pensamiento de decenas de especies que realizan en este ambiente su cría. De ellos, destacan por encima de todos los charrancitos y los chorlitejos patinegros. “Hemos tenido unas 150 parejas reproductoras que viene de África para criar y cuya productividad de pollos es buena. En relación a los chorlitejos, que están en peligro de extinción, hay unas 50 parejas, y la playa de levante es uno de los pocos sitios en que estas especies crían en playa natural”, ha puntualizado Macarena Castro, ex directora de la Estación de Investigación que había en el parque y profesora e investigadora de la UCA.
No obstante, estos datos han estado, en buena medida, promovidos por esta Estación de Investigación que estuvo funcionando en Los Toruños en los años 2011 y 2012 pero que, una vez instaurada la situación económica actual desapareció. “Hacíamos un seguimiento de aves costeras y de los humedales, así como de dar información y hacer un trabajo de prevención, para que muchos de los que van a la playa se diesen cuenta de que no estaban solos, ya que a unos pocos metros de su toalla podía estar una de estas especies criando”, ha subrayado Castro. De hecho, fue esta labor la que permitió que aumentara el número de pollos. “Se hizo un vallado delimitando la parte en que se creía que estas especies podían criar y se observó más tarde que la población había crecido considerablemente”, ha matizado la técnico de Medio Ambiente. Esta medida parece haber sido fundamental, ya que se pasó de 20 a 150 parejas.
Sin embargo, y a pesar de ser ambas aves las más abundantes en la marisma, no son las únicas. “En esta fecha de invernada, sobre todo podemos encontrar aves limícolas (las que se encuentran normalmente en zonas húmedas y costeras), y, de hecho, la playa de levante tiene una de las mayores concentraciones de zarapito real y zarapito trinador, correlimos, archibebe, garzas reales, garcetas o zancudas”, ha enumerado Eloísa Ramos. Pero de todas ellas, el ave estrella es el águila pescadora. “Cada vez más a menudo se ven uno o dos ejemplares que aprovechan las crecidas del río y utilizan la marisma para alimentarse, pero es una ave casi extinta y actualmente está en un proyecto para intentar recuperarla”, informa Ramos.
Esto, en lo referente a la fauna que surca los cielos, a la que habría que añadir las especies marítimas, crustáceos, anfibios, reptiles y mamíferos. Pero la flora es otra cuestión aparte. “Nuestros biólogos nos suelen decir que hay especies muy similares, que la evolución de las plantas ha hecho que, incluso, se den plantas que no se puedan diferenciar unas de otras”, ha comentado la técnico del parque. Esta gran cantidad y variedad de vegetación se debe, en cierta medida, a las características de las marismas que suelen dar como consecuencia distintas especies. “La vegetación de la marisma la peculiaridad que tiene es que está adaptada a vivir sumergida. Así, surgen especies vegetales que tienen que hacer frente a fuertes vientos de levante, altos grados de insolación, sustratos fangosos, anoxia (falta de oxígeno), a lo que se suma que tienen que aprender a vivir bajo el agua”, establece Eloísa Ramos. Asimismo, y dependiendo del nivel de la marisma, se dan diferentes particularidades. De este modo, si el nivel es bajo, las especies están totalmente adaptadas; si el término es medio, un nivel medio; y las que sufren un nivel alto, son las especies típicas que rozan con la Algaida. En líneas generales, podemos hablar de almajos, sarcocornias o pinar.
Control y prevención
Sin lugar a dudas, el control y la prevención son dos factores clave en la evolución y preservación de estas especies. Y, de hecho, así lo han demostrado las observaciones posteriores después de haber adoptado una serie de medidas.
No obstante, la crisis ha hecho que esta partida también haya desaparecido y, con ella, el trabajo de una serie de voluntarios y profesionales de la UCA que permitieron la preservación de estas aves. “Con la crisis se han parado muchos proyectos de concienciación y divulgación. Esto puede hacer que mucho de lo que ya se había alcanzado y avanzado, se desbarate, ya que esas campañas se pierden y, progresivamente, la gente puede perder esa conciencia que se había adquirido”, ha expuesto Macarena Castro, ex directora de la Estación de Investigación.
Actividades
Sábado. Pinar de La Algaida
- 9.00 - 13.00 horas. Demostración de anillamiento científico
- 9.30 - 11.30 horas. Salida fotográfica ornitológica
- 10.00 - 12.30 horas. Puesto de Observación Puente Río San Pedro
- 12.00 - 14.00 horas. Taller infantil de manualidades y concurso de dibujo
Domingo. Los Toruños
- 9.30 - 11.30 horas. Salida fotográfica ornitológica
- 10.00 - 12.30 horas. Puesto de Observación Puente Río San Pedro
- 12.00 - 14.00 horas. Taller infantil de manualidades y concurso de dibujo
Ademas...
Como cualquier otro fin de semana en el parque de Los Toruños, no podían faltar las imprescindibles en este espacio. Nos referimos, como no podía ser de otro modo, a las actividades deportivas y al aire libre. En este sentido, todos aquellos amantes de la naturaleza y el deporte podrán realizar durante esta jornada paseos en kayaks, itinerarios en bicicleta, así como rutas guiadas en este mismo vehículo o en tren. Por otra parte, se ha organizado un mercado de artesanía que pretende ofrecer a locales y visitantes productos de todo tipo y belleza.
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