"En Andalucía y en España estamos aguantando. No digo que la situación financiera sea sólida, pero han llegado a la crisis con una solvencia que no tiene el sector financiero de nuestro entorno", explicó el consejero de Economía, que agregó que "en nuestro caso" el problema es que "han comprado más de lo que han vendido" y tienen pendiente vencimientos que pagar.
"Nuestras entidades pueden tener ya este año vencimientos, aunque por ahora no ha sido necesario socorrer a ninguna, lo cual es un dato", subrayó Griñán tras recordar que algunas entidades asumieron riesgos al "meterse" en sectores como el inmobiliario.
En su comparecencia ante el Parlamento para informar, a petición propia, de la situación económica de Andalucía y sus perspectivas, Griñán se refirió también al proceso de fusión de Unicaja con la caja de Castilla-La Mancha y mostró su satisfacción por el hecho de que una entidad andaluza haya sido el "caballero blanco".
Tras advertir de que en junio se podría llegar a una situación de inflación cero, el vicepresidente económico insistió en que es "muy difícil" saber cuándo comenzará a recuperarse la normalidad.
Aunque todavía no se dispone de los datos de la contabilidad del cuarto trimestre de 2008, avanzó que los indicadores de coyuntura reflejan una profundización en la trayectoria de deterioro que manifiesta la economía andaluza, por lo que el año 2009 será "muy difícil" en términos económicos.
"El Gobierno andaluz no ha permanecido con los brazos cruzados, sino todo lo contrario", remarcó Griñán, que recordó la "poderosa batería" de medidas a corto plazo puestas en marcha desde febrero de 2008, cuando se aprobó un paquete de licitaciones para desplegar el potencial inversor del presupuesto de ese ejercicio.
Entre estas medidas, resaltó que se ha formalizado una operación de préstamo con el Banco Europeo de Inversiones por 50 millones de euros, y se ha firmado un convenio con el Instituto de Crédito Oficial para la financiación de proyectos empresariales en Andalucía, con una movilización de recursos de 100 millones.
Destacó también el acuerdo firmado con entidades financieras para financiar a pequeñas y medianas empresas, dotado con 720 millones en 2008 y 2009 y bonificación de los tipos de interés.
Junto a estas medidas orientadas a la liquidez, se trabaja para apoyar la solvencia y estabilidad del sistema financiero, para lo que se pondrán en marcha líneas de avales a títulos de renta fija, emitidos por fondos de titulización de activos para financiación de pymes, en un caso, y de viviendas protegidas, en otro.
Por otra parte, subrayó el esfuerzo para incrementar las inversiones públicas y acelerar su ejecución, tras lo que recordó que hace justo una semana se aprobaron acuerdos por valor de 1.052 millones para licitación de obra pública.
Además, y como complemento al Fondo Estatal de Inversión Local, está en marcha el Programa de Transición al Empleo de la Junta de Andalucía (Proteja), con una dotación de 360 millones de euros.
El PP pide reformas estructurales e IU un cambio de modelo
El parlamentario del PP-A José Enrique Fernández de Moya centró su intervención en las causas "propiamente andaluzas" de la crisis y, tras subrayar que 267.000 hogares andaluces tienen a todos sus miembros en paro, interpeló al consejero sobre si su gobierno sigue manteniendo que la destrucción de empleo será de 140.000 puestos de trabajo en este ejercicio.
Tras subrayar que la política presupuestaria y las reformas estructurales son "fundamentales" en épocas de crisis, el PP advirtió de que la pérdida de empleo va a suponer una modificación de la previsión de ingresos, lo que ha negado Griñán, y pidió reformas tributarias.
"¿Están dispuestos, por ejemplo, a incrementar las exenciones del 95 al 99 por ciento en las transmisiones entre empresas familiares?", se preguntó De Moya, que reclamó también una reforma "urgente" del sistema educativo, una reordenación del sector público andaluz y un fortalecimiento del sector industrial.
IU pidió un cambio del modelo productivo y fórmulas "adicionales" de protección social, lo que obligaría, según defendió su portavoz, Pedro Vaquero, a recurrir al endeudamiento.
A juicio de IU, el primer problema es que las medidas que se están adoptando de forma coordinada con la UE o el G-20 no son las más "adecuadas" para responder a situaciones como la de Andalucía.
"La propuesta del control financiero, que aquí ya ha ejercido el Banco de España, no vale porque el hecho es que también sufrimos la crisis", advirtió Vaquero, que dijo que la actual situación está pidiendo "a voz en grito" un cambio del modelo productivo, que es el que "ha generado el problema al modo español o andaluz".
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